Se acabó enero, y no fue un buen mes para las bolsas. Además fue un inicio de año volátil, de muchos movimientos y vaivenes: en siete días, el Dow Jones se ha movido más de 200 pts. Y de saldo negativo. El peor mes desde el mismo mes del año pasado. El Dow Jones, en enero, se hundió un 3.7%, el Nasdaq un 2.1% y el S&P'500 un 3.1%.
Pero que no cunda el pánico. El dicho bursátil sostiene que “como va enero, va el año entero”. Pero el almanaque no valida esa afirmación: hay en torno a un 50% de probabilidades de que la bolsa termine este año con ganancias pese al descenso de enero. En cinco de los últimos seis años en los que enero registró pérdidas (2003, 2005,02009, 2010, 2014) el S&P’s 500 terminó el año con plusvalías. La única excepción fue el 2008, el año de la Gran Recesión y la gran debacle bursátil. Pero el caso contrario lo ejemplifica el año pasado: el mes de enero fue peor que este año, con una caída del S&P’s 500 del 3.6%, y sin embargo Wall Street acabó con ganancias, con una subida en el año del 11%.
Para todo el mes, el peor sector fue el energético, incapaz el mercado petrolero de detener el descenso del crudo. Pero también les fue mal a las financieras, cuyos resultados han sido flojos. El director ejecutivo de JP Morgan, Jamie Dimon, no dudó en culpar a las autoridades por su excesiva regulación de la mala marcha de algunas de sus unidades de inversión.
Hoy las bolsas cedieron terreno ante un dato del PIB para el cuarto trimestre que fue peor de lo previsto. La economía se expandió a una tasa de 2.6% comparado con 3.0% del consenso. En el tercer trimestre el PIB aumentó un 5.0%. Por otro lado, los inversionistas están preocupados con unos resultados empresariales que han sufrido el impacto del descalabro del petróleo y la apreciación del dólar.
Al cierre de la sesión de hoy, el Dow Jones perdió un 1.45% para cerrar en los 17,164.95 pts mientras que el Nasdaq se hundió un 1.03% para concluir en los 4,635.24 pts. El S&P’s 500 se deprimió un 1.3% a los 1,994.99 pts. Así que mal empezó enero y mal terminó. A ver si febrero lava un poco la cara de este inicio de 2015.