Wall Street terminó con retrocesos, pero sin las caídas, bastante más profundas, observadas en otros mercados. Eso nos hace pensar que lo que más pesó en la jornada de hoy, lo que más puso nervioso a los inversionistas, fueron los últimos acontecimientos de Ucrania, que al parecer se está propagando a otras áreas.
De eso se queja el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, quien tuvo que cancelar un viaje de trabajo a Turquía antes el recrudecimiento de las tensiones en el este de Ucrania y la denuncia de la presencia directa de fuerzas rusas en el área de Donetsk. A su vez, las tropas rebeldes han abierto un nuevo frente hacia el sur, hacia el mar de Azov.
Esas acusaciones del presidente ucraniano las respaldó la OTAN, que sostiene que “más de mil soldados rusos están operando dentro de Ucrania”. Sin embargo, Rusia mantiene su discurso de que sus soldados no están atravesando la frontera. Esta misma tarde, con el cierre de los mercados, está previsto que se reúna el Consejo de Seguridad de la ONU con carácter de urgencia. ¿En dónde quedaron, entonces, los pactos alcanzados entre el presidente ucraniano y su homólogo ruso en la reunión de Minsk de principios de semana?.
Como resultado de esas acciones, Alemania, Francia e Italia amenazaron a Moscú con otra ronda de sanciones, y será un tema a tratar en la cumbre de la UE del sábado. Sin embargo, los países del este de Europa, encabezados por Hungría, señalan el impacto que las sanciones están teniendo en sus economías.
Sea como sea, Europa es más sensible al conflicto ucraniano que Wall Street y, en consecuencia, las bolsas se resintieron mucho más desde que abrieron. Al cierre de los parqués europeos, el DAX de Francfort se hundía un 1.1%, golpeado además por el inesperado incremento del desempleo en agosto, la bolsa de Milán un 2.0% y el Ibex-35 de Madrid un 1.1%. Más moderados eran los retrocesos del Cac-40 de París (-0.7%). El euro se depreciaba ligeramente y permanece por debajo de los 1.32 dólares.
Frente a esos desperfectos europeos, Wall Street salía bastante mejor librado. Con el cierre de Europa, de hecho, el tono de los mercados estadounidenses mejoraron y las pérdidas se estrecharon. Al cierre el Dow 30 perdía un 0.25% para terminar en los 17,079.57 pts mientras que el Nasdaq 100 retrocedía un 0.26% a los 4,557.70 pts. El S&P’s 500, como era de esperar, perdió los 2,000 pts al bajar u 0.17% y concluir en los 1,996.74 pts.
No sólo las sanciones económicas a Rusia afectan menos a Estados Unidos que a Europa, sino que además los datos publicados hoy fueron bastante mejores de lo esperado. Sobre todo el PIB para el segundo trimestre: fue revisado al alza de 4.0% a 4.2% como resultado de un mejor comportamiento del sector externo y de la inversión no residencial. Los subsidios de desempleo, por otro lado, se mantuvieron por debajo de los 300,000: su lectura para la semana terminada el 23 de agosto fue de 298,000, sin cambios respecto a la semana anterior. Esos datos también contribuyeron a que la bolsa de Nueva York mostrara una mayor resistencia que la europea. Finalmente, la información corporativa fue escasa, aunque en general negativa. Publicaron algunas minoristas como Abercrombie & Fitch y Guess, pero sus resultados fueron peores de lo previsto y fueron castigadas. Abercrombie, en la jornada, se dejó un 5.0% y Guess casi un 9.0%.
Al cierre, el presidente Barack Obama dio una conferencia de prensa en el que trató los temas de Irak y Rusia. Respecto a Irak, reconoció que los ataques aéreos habían servido para hacer retroceder el avance del Estado Islámico. Y reconoció que para consolidar esos progresos era necesario una política militar en todo el área, incluyendo Siria, si bien aún no estaba definida. Se sabe que Obama está detrás de conseguir una alianza amplia con el fin de realizar alguna intervención en Siria.
Respecto a Rusia, hizo referencia a las acusaciones de la OTAN de que Rusia estaba ayudando a los rebeldes prorrusos del este de Ucrania, como muestran las imágenes reveladas por la OTAN en las que se aprecia la incursión de tanques rusos en territorio ucraniano. Su conclusión es que la nueva incursión de Rusia tendrá más consecuencias, las cuales se podrían definir en el viaje a Europa que hará la semana que viene. Para Obama, Rusia está más aislado que nunca desde la Guerra Fría.
Junto a los conflictos geopolíticos, los cuales también pueden afectar mañana a los mercados globales, en Europa se publican dos datos muy importantes para el futuro curso de la política monetaria: la inflación y la tasa de desempleo para el mes de agosto. En Estados Unidos, tras el PIB de hoy, se publicarán el gasto y el ingreso personal para julio, así como los deflactores del gasto, el indicador preferidos de inflación de la Fed. Este indicador también será de mucha relevancia para la Reserva Federal: nos dirá con qué fuerza empezó el gasto de consumo el tercer trimestre y con qué presiones inflacionarias está lidiando la economía estadounidense.