El peso cerró la semana con una depreciación de 1.95% o 35 centavos, cotizando alrededor de 18.46 pesos por dólar, colocándose como la divisa más depreciada entre los principales cruces del dólar, mientras que la mayoría de las divisas registraron una apreciación importante. Cabe recordar que la debilidad del peso se debe a que es la moneda latinoamericana más operada en el mercado cambiario, lo cual permite que sea empleada para especular sobre otras economías emergentes, a pesar de que en México existan condiciones de estabilidad en el crecimiento y en precios.
El dólar perdió terreno frente a otras divisas con la publicación de indicadores económicos poco favorables en Estados Unidos que mostraron una contracción de la actividad manufacturera durante enero y una desaceleración del crecimiento del sector servicios a su menor ritmo desde febrero de 2014. Dichos datos disminuyeron la probabilidad de que la Fed suba su tasa de referencia en marzo, debilitado la demanda por dólares en el corto plazo. Cabe agregar que al cierre de la semana se publicó que la tasa de desempleo de Estados Unidos bajó a 4.9%, su nivel más bajo desde 2008, lo cual permitió una ligera recuperación del dólar frente a sus principales cruces.
El dólar canadiense cerró la semana con una apreciación de 0.42%, cotizando alrededor de 1.3917 dólares canadienses por dólar. Durante la semana, el dólar canadiense observó una fuerte apreciación hasta un mínimo de 1.3640 canadienses por dólar, luego de que datos económicos poco favorables en Estados Unidos, redujeron la probabilidad de un incremento a la tasa de referencia durante la primera mitad del año, favoreciendo a la mayoría de las divisas frente al dólar. No obstante, hacia el cierre de la semana se publicó la nómina no agrícola de Canadá, en donde se mostró una caída de 5,700 posiciones laborales durante enero, afectando las ganancias del canadiense y cerrando con una apreciación moderada.
El euro cerró la semana con una fuerte apreciación de 3.03%, cotizando alrededor de 1.1158 dólares por euro. Al igual que la mayoría de las divisas, la fortaleza del euro provino de los datos económicos poco favorables de Estados Unidos, ya que de forma transitoria se redujo la percepción de que la Reserva Federal subirá su tasa de referencia de manera sostenida durante el año. No obstante, es poco probable que el euro continúe recuperándose durante febrero, ya que todavía se espera que el Banco Central Europeo adopte una postura más acomodaticia de política monetaria, por lo cual la principal resistencia de la paridad se ubica en 1.13 dólares por euro.
A la par del euro, el franco suizo cerró con una apreciación semanal de 3.24%, cotizando alrededor de 0.9910 francos por dólar, colocándose como una de las divisas más apreciadas entre los principales cruces. Cabe destacar que las divisas más apreciadas de la semana son aquellas de países cuyos bancos centrales mantienen una postura altamente acomodaticia, lo cual había permitido al mercado especular en base a la divergencia con la política monetaria de la Reserva Federal. Hacia delante se espera que el franco y el yen se mantengan entre las divisas más apreciadas en el año debido a su naturaleza como refugio, ya que se anticipa que continúe la volatilidad en los mercados financieros.
La libra esterlina cerró la semana con una apreciación de 1.81%, cotizando alrededor de 1.4503 dólares por libra. Cabe señalar que la libra esterlina ganó terreno a pesar de que el Banco de Inglaterra recortó sus expectativas de inflación y crecimiento, reduciendo la probabilidad de un incremento a la tasa de referencia durante el resto del 2016. Durante la semana, el Subgobernador del Banco de Inglaterra, Ben Broadbent, señaló que los hacedores de política monetaria no tienen urgencia por subir su tasa de referencia, aunque tampoco existe necesidad de recortes más adelante.
El peso chileno cerró la semana con una apreciación de 0.98%, cotizando alrededor de 704.75 pesos chilenos por dólar. A diferencia de otras divisas, la recuperación del peso chileno por tercera semana consecutiva se debió a que el cobre a la par de otras materias primas mostró una recuperación. El precio del cobre subió 1.38% durante la semana a 4,633.25 dólares por tonelada métrica. Al igual que el resto de las divisas latinoamericanas, los riesgos de nuevas pérdidas para el peso chileno se mantienen presentes y existe una alta probabilidad de que la cotización suba a niveles cercanos a 730 pesos por dólar antes de finalizar el primer trimestre del año.
El real brasileño cerró la semana con una apreciación de 2.37%, cotizando alrededor de 3.9039 reales por dólar. Al igual que el resto de las divisas, el real brasileño se recuperó por un relajamiento de la especulación de que la Reserva Federal subirá su tasa de referencia de manera sostenida durante el año. Durante la segunda semana de febrero se espera que el real vuelva a perder terreno ante la especulación de que el gobierno podría dejar de lado su meta fiscal de un superávit de 0.5% del PIB. La aversión al riesgo en los mercados financieros globales sumado a una crisis política y la posible falta de objetivos fiscales podrían llevar al real brasileño nuevamente a niveles de 4.15 reales por dólar.