Estaba anunciado, por las calles de México había un sujeto de lentes graduado del MIT que mientras saludaba pasivamente a sus lados, y estrechaba una mano cuando se la pedían, con la otra ocultaba el grueso filo de un par de tijeras para cortar cualquier céntimo que fuese necesario para mantener la tan añorada “estabilidad” del país.
El recorte es de 124 mil 300 millones de pesos, que es lo equivalente a cerca del 0.7% del PIB, muy cercano a lo que intuíamos en Dinero Llama Dinero (aquí y acá), y ha sido anunciado de la propia voz de la mente detrás del dinero, el Secretario de Hacienda Luis Videgaray.
La composición del recorte viene 65% del gasto corriente, y 35% del gasto de inversión.
Pemex dará de su bolsillo 62 mil millones de pesos, mientras CFE dará otros 10 mil millones, lo que deja 52 mil millones al aire para dirimir entre las diferentes dependencias del Gobierno Federal. 32 mil millones se quitarán del capítulo 1000 del gasto, que son servicios personales y operativos, los cuales se distribuirán entre recortes a servicios personales de mandos medios y superiores; disminución de plazas eventuales y de honorarios; restricciones a las creaciones de plazas, y una disminución en el gasto social. Aunque el ajuste también implica cambiar las metas del Programa de Pensiones para adultos mayores, y el programa para el desarrollo de zonas prioritarias de Sedesol.
Otros 18 mil millones serán de los proyectos de inversión que traía el Gobierno Federal, es decir del tan esperado recurso proveniente del Plan Nacional de Infraestructura, y del que dependía prácticamente el componente de obras civiles en la construcción nacional.
Los dos proyectos cancelados hasta la fecha son: el tren Transpacífico Quintana Roo-Yucatán y el tren México-Querétaro cuya licitación se estaba esperando nuevamente esta semana. El proyecto del Nuevo aeropuerto de la Ciudad de México sigue en pie.
Esto hizo que del recorte de los proyectos de inversión, la más castigada fuese la Secretaría de Comunicaciones y Transporte, con el 22.6% del total del recorte asumido, seguido lejanamente de la Secretaría de Educación Pública con el 14% de los recorte asumidos.