México sigue siendo una fuente de noticias, tanto por los efectos que han generado las amenazas de Donald Trump en nuestro país, como por la inconformidad de los mexicanos por el aumento en los precios de las gasolinas y el diésel, lo cual ha generado disturbios y vandalismo en diversos lugares del país, alentados en varios casos por algunos partidos políticos para provocar miedo.
En el sector político, también vimos este miércoles el regreso de Luis Videgaray al gabinete del presidente Peña Nieto, en sustitución de Claudia Ruiz Massieu, sin que se diera una explicación al pueblo de México, aunque no se necesita adivinar que es por la mejor relación que Videgaray tiene con Trump, contrario a Ruiz Massieu.
En este entorno de incertidumbre social y político, el tipo de cambio registró su mayor depreciación al cerrar sus operaciones en niveles históricos de $21.5225 (spot –venta) según el Banco de México, lo que le representó una pérdida de 47.3 centavos (2.24%), con respecto a la jornada previa. Esta depreciación, se le atribuye a eventos locales, ya que el dólar medido por el índice DXY tuvo una depreciación de 0.47%, con respecto a la canasta de seis monedas, en el mismo periodo. También continuó la venta de bonos (Ms) en México al seguir registrando caídas en sus precios.
Por el contrario, la Bolsa en México, medida por el Indice de Precios y Cotizaciones (IPC) tuvo un comportamiento positivo al cerrar en 46,588 puntos, con una ganancia de 464.4 puntos, equivalentes al 1.01%. Sin embargo, en términos de dólares el IPC cerró con una pérdida de 1.49%. lo que explica que para los inversionistas extranjeros, la caída en dólares la vieron como una oportunidad para tomar posiciones.
En el resto del mundo, la mayoría de los mercados bursátiles también cerraron con ganancias, incluyendo el mercado neoyorquino, donde sus tres principales índices tuvieron una ganancia promedio de 0.58%, buscando superar los recientes máximos históricos que alcanzaron en diciembre pasado.