El mundo de los criptoactivos mejor conocidos como criptomonedas se ha convertido en un fenómeno reciente dentro de los mercados financieros mundiales ya que han brindado una nueva oportunidad de dinero e inversión que funcionan fuera de las instituciones financieras.
En términos de capitalización en el mercado, el bitcoin es la criptomoneda que sigue tendiendo mayor valor en el mercado y capitalización total en el mercado de divisas; sin embargo, según el sitio Coinmarketcap.com existen actualmente más de 1,100 criptomonedas (o altcoins) y diario se crean más cuyos proyectos y objetivos son diversos, tal es el caso de la empresa Kodak que recientemente creó el kodakcoin e incrementó sus acciones en más del doble en enero de 2018.
En este sentido, resulta importante saber cuáles son las razones que hacen que los precios se muevan, entre los cuales se pueden tener dos aspectos fundamentales: lo atractivo que resulta para los inversionistas y, la oferta y la demanda. Sin embargo en el caso de las altcoins al parecer no funciona de esta manera.
Un estudio para la revista de mercados financieros internacionales, instituciones y dinero y realizado por Ciaian et. al. (2018) analiza cuáles son los factores que indicen en los precios de las altcoins y para ello postulan dos hipótesis: la primera, que los precios son impulsados por los precios del bitcoin y la segunda, que las similitudes en la conformación de precios entre el bitcoin y las altcoins le dan fuerza a la cointegración entre los mercados.
Un aspecto fundamental en los precios de una divisa es la oferta, ya sea a corto, mediano o largo plazo, puesto que a mayor tasa de crecimiento, mayor será la inflación, por ejemplo, la mayoría de las criptomonedas monedas han tenido un crecimiento continuo; sin embargo, en el caso de Ripple Nova, BitShares o MintCoin ha sido diferente puesto que su tasa de crecimiento ha sido discontinua en el tiempo.
Adentrándonos en este estudio, los investigadores analizan 16 altcoins entre las que se encuentran: bitcoin, ether, litecoin, monero, dogecoin, por mencionar algunas, y sugieren de manera empírica que en el corto plazo los precios de la mayoría de las altcoins estudiadas sí dependen de las variaciones en los precios del bitcoin; sin embargo, conforme transcurre el tiempo son menos las altcoins dependientes.
Para la investigación, utilizan un modelo matemático Autoregresivo de Rezagos Distribuidos (ARDL por sus siglas en inglés), que son utilizados extensamente en análisis econométricos para determinar si existe una relación entre variables o fenómenos a largo plazo (consultar D. Giles).
Los hallazgos son importantes puesto que se pudo constatar que a largo plazo es poco el impacto que tiene el precio del bitcoin en las altcoins. Asimismo, concluyen que los aspectos macroeconómicos y financieros a nivel mundial son más importantes que otros, como la oferta y la demanda, al momento de determinar los precios.
Lo anterior permite contar con un panorama sobre los factores que determinan los precios en las altcoins, a diferencia del corto plazo donde las implicaciones pueden ser importantes, por ejemplo las bajas en el Bitcoin. Finalmente se indica que los factores que determinan el precio en las altcoins estudiadas son externos y por ello resulta más complejo realizar un pronóstico sobre su comportamiento a largo plazo.
Sin lugar a duda, cada vez somos testigos del surgimiento de más criptomonedas lo cuál nos obliga a los interesados en el mundo de las inversiones en altcoins, contar con mayor información e investigación sobre este fenómeno.