El peso mexicano cotiza en 19.9180 pesos por dólar con una depreciación de 0.43%, o 8.5 centavos, lo que se da por dos factores: 1) temores de una posible recesión en EEUU y 2) la contracción en el precio del petróleo.
En la sesión se publicaron indicadores inmobiliarios débiles en Estados Unidos que incrementan el nerviosismo por una posible recesión. Por su parte, el petróleo se reduce ante las preocupaciones por la demanda, mientras que es posible que la oferta se incremente si se llega a un acuerdo nuclear.
Desde un enfoque técnico el peso mexicano sigue con tendencia a la baja, aunque esta se ha atenuado ya que continúan las preocupaciones en torno a la actividad económica global, lo que ha elevado la demanda por dólares estadounidenses como activo refugio. Por lo anterior, el peso mexicano se ha acercado al nivel de 20 pesos por dólar, que de superar de manera sostenida podría irse nuevamente hacia 20.30 pesos por dólar. Hacia abajo, el siguiente soporte relevante se encuentra en 19.80.
Hacia adelante, los participantes del mercado estarán a la espera de las minutas de la Fed correspondientes al anuncio de política monetaria del 27 de julio que serán publicadas el miércoles 17 de agosto a las 13 horas.