Tras la victoria del oficialismo en las elecciones legislativas que se celebraron en la Argentina este último domingo, la mirada de los inversores se centra ahora en el Congreso de la Nación, donde el gobierno de Mauricio Macri intentará negociar tres reformas consideradas fundamentales por el mercado: la impositiva, la laboral y la previsional.
Rápido de reflejos, el presidente anunció este lunes que citará a gobernadores, gremios y empresarios, entre otros sectores, para tratar el paquete de modificaciones que promueve de cara al tramo final de su mandato.
Si bien el mercado había descontado una victoria del oficialismo, el resultado de la elección fue mejor al esperado. Por eso, en medio de un récord de volumen operado, el principal índice de acciones de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires (BCBA), el Merval, trepó un 3% el lunes para cerrar en un máximo histórico de 27.782,60 puntos. Ayer, el indicador volvió a subir y sobrepasó las 28.000 unidades.
Además, una de las variables que más monitorean los analistas e inversores, el riesgo país -clave para abaratar el financiamiento- retrocedió un 2,3% el lunes, a un nuevo mínimo en más de una década.
Paula Premrou, CEO de Portfolio Personal, señala que aunque el mercado venía descontando este resultado electoral, “la magnitud del mismo podrá imprimir un impulso adicional en las cotizaciones, aun cuando después pueda sobrevenir una corrección”. De todos modos -agrega- “esa corrección será dentro de un mercado que ya la anticipa, y lo hará con más fuerza a futuro, una mejora en la nota de riesgo y la vuelta del rótulo emergente, con lo que ello implica en términos de flujos”.
“Las negociaciones en el Congreso en los próximos meses son las que definirán la capacidad de los activos argentinos para seguir convergiendo a los precios de países similares de la región, como Brasil o México”, indica la consultora Ficonomics en su informe semanal, que recomienda “mantener los posicionamientos en activos locales, principalmente Lebac, pero no incrementar la exposición a los precios actuales, teniendo en cuenta que el mercado ya descontaba la noticia de un triunfo del oficialismo por un mayor margen”.
Así las cosas, el principal driver de los precios de los activos argentinos en las próximas semanas y meses será si el mayor capital político que ganó el oficialismo se traducirá en capacidad para materializar las reformas pendientes y para ir corrigiendo los desequilibrios de la macroeconomía, “o si estas intenciones terminarán diluyéndose en un congreso donde, si bien consiguió una mejora en la relación de fuerzas, el Gobierno sigue sin tener mayorías”, añade en su informe Ficonomics.
Sobre este tema tan importante para el futuro de las inversiones, las opiniones están divididas. Por ejemplo, Augusto Posleman, director de Portfolio Personal, es muy optimista y se muestra confiado en que el oficialismo aprobará el paquete de reformas. En cambio, Santiago López Alfaro, director de Delphos Investment, no piensa lo mismo: considera muy difícil que el gobierno pueda llegar a una negociación de ese tipo con el peronismo en el Congreso.
Al margen de lo anterior, en Delphos consideran apropiado “comenzar a evaluar una superior dolarización de carteras al aproximarnos al último bimestre del año”. Los expertos creen que la cuenta corriente seguirá deteriorándose, generando mayores presiones sobre la demanda de dólares.
La coalición Cambiemos, que llevó al presidente Mauricio Macri al poder en 2015, ganó este último domingo en 13 provincias, y con el 40,7% de los votos, amplió su base electoral en casi cinco puntos respecto a las PASO de agosto. El oficialismo logró revertir incluso el resultado en cinco provincias, incluida la madre de todas las batallas, Buenos Aires. Ganó espacio en el Congreso, con 107 diputados y 24 bancas en el Senado, aunque sin quórum propio, lo que lo obligará a buscar alianzas con otras fuerzas, algo que el mercado sabía de antemano.