Desde principios de 2020, cuando el fundador de Ethereum, Vitalik Buterin, anunció que habría una actualización de la red Ether, los alcistas de las criptomonedas han estado atentos al segundo token digital más grande por capitalización de mercado. Buterin prometió que la actualización, bautizada como Ethereum 2.0, supondría un "cambio de juego" para la blockchain de Ethereum, ya que reduciría las tasas de transacción y aumentaría la escalabilidad.
El despliegue de la actualización ha sido gradual y se espera que se lance por completo en algún momento del segundo trimestre de 2022. Según CoinDesk, a mediados de marzo, más de 10 millones de Ether -la criptodivisa subyacente de la red Ethereum- están comprometidos en el contrato de participación 2.0, lo que representa unos 26,000 millones de dólares del token según el precio reciente.
Los operadores y los inversionistas interesados en el token digital prevén una fuerte subida una vez finalizada la actualización. Se espera que la criptomoneda suba entre un 10% y un 15%, lo que supondría una rentabilidad superior a la del índice de precios al consumo de EE.UU. de febrero, que alcanzó el 7.9% anual. AAA, que alcanzó el 7.9%.
Con muchas inversiones que ahora rinden rendimientos negativos cuando se ajustan a la inflación, los inversionistas alcistas en criptografía esperan una avalancha en ETH.
Sin embargo, a pesar de las perspectivas fundamentales positivas, el panorama técnico parece mucho menos halagüeño.
La reciente subida de Ethereum encontró resistencia en la parte superior de un triángulo simétrico, ya que la criptodivisa continuó dentro de la misma tendencia, que en este caso es más baja. Además, si el triángulo simétrico se rompe a la baja, su objetivo implícito probablemente completará un tope hombro-cabeza-hombro (H&S) descendente. Ese es un patrón que se crea cuando la débil demanda no logra desarrollar un hombro equilibrado con su pareja.
Mientras tanto, el promedio móvil de 50 días cruzó por debajo del de 200, desencadenando un Cruce de la Muerte, y el de 100 días siguió su ejemplo, creando una formación bajista, en la que cada promedio móvil más corto está por debajo de los más largos. Esta relación "inversa" entre los promedios móviles ilustra que cuanto más reciente es el precio, más débil es, incluso después de ser suavizado por las medias.
Este patrón garantiza que un analista no se deje engañar por un movimiento fuera de la tendencia, sino que se asegure de que las fuerzas subyacentes del mercado en cuestión son débiles.
Estrategias de operación
Los operadores conservadores deberían esperar a que se complete el patrón H&S, con una ruptura a la baja a través de la línea de cuello descendente.
Los operadores moderados se conformarían con la finalización del triángulo simétrico.
Los operadores agresivos podrían ponerse en corto ahora, en la parte superior del triángulo simétrico.
Ejemplo de operación
- Entrada: $3,000
- Stop-Loss: $3,050
- Riesgo: $50
- Objetivo: $2,500
- Recompensa: $500
- Ratio riesgo-recompensa: 1:10