Lo que pasó ayer fue un tren de dos velocidades. En la renta variable, el IPC brincó desde primera hora de la mañana y se mantuvo con una pendiente alcista casi hasta medio día, y al llegar a las 45 mil unidades, prefirió el descanso y se dedico a flotar sobre un nivel merecido. Fue un alza de 0.61%, anunciando fuerte y a redoble la llegada del mes de agosto, y cuyo objetivo más cercano se ve sobre las 45,600 unidades, no antes.
El alza estuvo apoyada en las acciones de Alfa (MX:ALFAA) (2.85%), América Móvil (MX:AMXL) (1.40%), Coca Cola Femsa UB (MX:FEMSAUB) 1.04%, y Grupo LALA SA de CV (MX:LALAB) (3.01%), y lograron en su conjunto que el mercado regresase sobre los 45 mil puntos, un nivel perdido hace 2 semanas, y que por momentos no parecía poder regresar luego de que el mercado tocase el piso de las 43,713 unidades a inicios de la semana pasada, pero desde dónde ahora amenaza con rebatir la tendencia lateralizada de los últimos 3 meses. ¿Lo logrará?
Nosotros creemos que sí, pero por mera cuestión técnica del mercado, cuya temporal caída ha logrado animar a los inversionistas, y puede prolongar el alza, tal vez hasta un nuevo record histórico. Sin embargo, el ancla es muy pesada.
Ayer por ejemplo, el INEGI publicó los datos de la Inversión Fija en México al mes de mayo, la cual creció 2.3% a tasa anual, debajo de lo estimado por el consenso que preveía una tasa del 3.0%,y co un deterioro sustancial de la construcción, que sólo animó en 1.5% como resultado de un menor crecimiento en el componente no residencial (0.7%), lo que implica que en los primeros cinco meses del año, la inversión sólo ha crecido un 4.7%, mucho más de lo observado en el 2014, cuando en el mismo periodo la inversión cayó 1.1%, pero notablemente menor a lo necesario para arremeter con crecimientos del 3.0% para el conjunto de la economía. Nos está quedando de largo nuevamente el año.
¿Entonces porque subió el mercado?, porque algunas cifras adelantadas de junio sugieren que el dinamismo de la inversión puede ser mayor. En otras palabras, el dato es rezagado, insuficiente como para por si mismo detener la potencial alza, pero cuya semblanza limita el optimismo profundo.
Por otra parte, la moneda nacional siguió depreciándose este día, y hoy llegó a cotizar por encima de 16.20 unidades, la razón estuvo en que Dennis Lockhart, presidente de la Fed de Atlanta, comentó que septiembre sería un mes propicio para que el Banco Central iniciase su alza de tasas de interés.
Lockhart es un miembro de la Fed con derecho a voto este año, que se ha caracterizado por ser muy prudente a la hora de evaluar la economía estadounidense, y que su discurso de hoy se centrase en el progreso económico acumulado, fue como un guillotinazo para la euforia sobre el dólar.
Al respecto, Blackrock advirtió también que el “rally” de la moneda verde estaba apenas comenzando, y que podría durar varios años, como en los 70´s, donde el rally (después de la libre flotación), llegó a durar cerca de 7 años.
“El dólar se aprecia levemente antes de las primeras alzas de la tasa de interés de la Fed”, publicó hoy Blacrock “después detiene su paso o incluso se deprecia algo durante un año, para reanudar posteriormente el rally. Este patrón podría reproducirse perfectamente actualmente”.
Y así lo confirmó hoy el mercado, después de las declaraciones de Lockhart la moneda se deprecio con todo y la activación de la subasta de Banxico sin precio mínimo en 200 millones de dólares diarios. Pero además el dinero salió directamente de la curva a plazos, la cual se apretó sobre todos sus nodos renovando el sesgo alcista de la curva.