Las criptomonedas inician la semana con descensos marcados. El Bitcoin cede hasta los u$s90.597,33. En los últimos siete días, la criptomoneda líder pierde más de un 6%, después de alcanzar un máximo anual de u$s102.300 dólares el 7 de enero.
Las altcoins también registran caídas. Ethereum pierde más de un 2% y cae por debajo de los u$s3.200. Al igual que el BTC, la segunda criptomoneda más grande no ha tenido su mejor semana, con una devaluación superior al 10% en los últimos siete días.
Otros tokens también sufren pérdidas más grandes: Cardano pierde hasta un 8% en las últimas 24 horas, mientras que Sui y Avalanche caen un 7% y un 6%, respectivamente. Criptomonedas como XRP, BNB, Solana y Dogecoin experimentan caídas de entre un 3% y un 5%.
Qué hay detrás de la sangría
La debilidad del mercado de criptomonedas coincide con la publicación de varios indicadores macroeconómicos en Estados Unidos que fueron mejores de lo esperado. El dato más reciente es el informe de empleo de diciembre, que reveló la creación de 256.000 nuevos puestos de trabajo no agrícolas, superando con creces las expectativas, que anticipaban 160.000 nuevos empleos.
Además, la tasa de desempleo disminuyó en una décima porcentual, ubicándose en el 4,1%. Este dato ha disipado por completo las expectativas de un recorte de tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) en enero y casi también en marzo y mayo. Cabe recordar que el banco central de EE. UU. redujo su pronóstico de recortes en 2025, bajándolo a 50 puntos básicos (pb), lo que equivale a dos reducciones de 25 pb o un gran recorte de 50 pb.
Michael Brown, estratega de investigación sénior de Pepperstone, valora que «el FOMC sigue en camino de ‘saltarse’ la reunión de enero, dejando la tasa de fondos federales sin cambios, lo que dará tiempo para evaluar los efectos de la normalización de 100 puntos básicos implementada el año pasado, al mismo tiempo que permitirá revisar los riesgos inflacionarios y los impactos de las primeras políticas del gobierno entrante de Trump».
Por otro lado, los expertos de 10x Research señalan que, aunque las narrativas centradas en las políticas de Trump siguen siendo el tema principal de discusión, «los mercados financieros cuentan una historia diferente». Resaltan que las acciones de EEUU han borrado todas las ganancias obtenidas desde las elecciones de Trump en noviembre, cuando inicialmente se esperaba un mayor crecimiento y recortes de impuestos. Además, el rally esperado en las altcoins tras las elecciones se desvaneció rápidamente el 6 de diciembre. Esta fecha no es una mera coincidencia, ya que marca un momento clave con implicaciones significativas.
Estos analistas también observan que los volúmenes de negociación de criptomonedas han caído «sustancialmente» desde los máximos de principios de noviembre, y las tasas de financiación «alcanzaron su punto máximo» el 6 de diciembre. Esto sugiere un significado profundo para esa fecha, que coincide con la revisión de perspectivas de la Fed y la publicación de datos macroeconómicos menos favorables.
No obstante, otros analistas tienen una visión menos pesimista sobre el futuro de las criptomonedas, especialmente del bitcoin. Según expertos como Axel Bitblaze, el bitcoin suele experimentar caídas similares a las de los primeros meses después de un ‘halving’ (reducción de recompensas por minar bloques), como el que se prevé para abril de 2024. «Todos sabemos lo que ocurrió después de las caídas de 2017 y 2021», recuerda.
«Bitcoin está en una encrucijada, con un mercado que refleja tanto ambición como cautela. La ruptura de esta consolidación marcará el siguiente capítulo en la historia del activo digital, determinando si continuará su camino hacia nuevos récords o si retrocederá para buscar un nuevo equilibrio. En cualquier caso, el interés en bitcoin sigue siendo un termómetro del apetito por el riesgo en los mercados globales, y su evolución será clave para comprender hacia dónde se dirige el ecosistema de criptomonedas», concluyen los analistas de Barclays (LON:BARC).