La CIA y el FBI investigan si el gobierno ruso interfirió en las elecciones estadounidenses, algo que no solo haría tambalear a Donald Trump sino a Wall Street.
Volatilidad. Probablemente conozcas cuánto temor y odio despierta esa simple palabra en cierta calle neoyorquina donde se encuentra el corazón histórico del distrito financiero mundial.
Pero el miedo que desprende tal palabra es tremendo…
La volatilidad extrema incómoda, y mucho, a los inversores, especialmente cuando los cambios de tendencia abruptos van de la mano con derrumbes significativos.
Ese pánico que se apodera de los inversores está sucediéndose en este mismo instante. ¿Estabas al tanto?
Donald Trump: expectativas sobre Wall Street
Wall Street empieza a sentir que las expectativas positivas que tenían respecto a Donald Trump se desinflan a medida que pasan los días.
Sí, no es todo color de rosa como se pintaba…
De hecho, en la última semana los analistas comenzaron a vislumbrar dificultades reales que surgen en la senda del gobierno norteamericano en manos de Donald Trump.
Lo que sucede es que el magnate republicano había anunciado durante su campaña un programa de reformas económicas que sedujo notablemente a los mercados financieros.
Después de todo, no hay otra forma de explicar el récord en 21.000 puntos que alcanzó el Dow Jones…
En la encrucijada
Resulta que ahora los analistas han notado que hay una ingente cantidad de dificultades para lograr la aprobación de su paquete de reformas.
Ese programa económico tenía, en primer lugar, una reforma impositiva que era música para los oídos de las empresas, dado que incluía una gran reducción en las escalas tributarias.
Además, el gabinete económico está conformado en gran medida por ex ejecutivos de Wall Street, que garantizaban el punto y final a la ley Dodd-Frank, cuyo control sobre las entidades financieras les impone grandes trabas.
El entusiasmo llegó incluso a rociar a la prometida reforma del sistema de salud, también conocida como Obamacare, que representa una carga para las compañías aseguradoras.
En ese paquete también encontramos el programa de inversiones públicas en infraestructuras, que generaría un nuevo impulso al sector energético, con gran presencia y peso en las bolsas.
Y hay pruebas de que el temor finalmente se está apoderando de los inversores…
Dudas en medio de la euforia
Tras el enorme entusiasmo inicial, ahora afloran las dudas sobre cuán sostenible podría ser esta euforia de principios de mandato.
Lo que esperan los mercados es que este nuevo mesías del Siglo XXI es que los lleva a una especie de tierra prometida, algo que vimos con suficiente claridad en un rally alcista sin precedentes.
¿En qué momento empezamos a despertar?
La semana pasada el Dow Jones sufría una corrección del 1,14%, la mayor caída en los últimos 6 meses. El S&P 500 perdió 1,24% en la misma rueda y el Nasdaq otro 1,83%.
¿Acciones sobrevaluada?
Según una encuesta realizada por Bank of America (NYSE:BAC) Merrill Lynch, los inversores consideran hoy que las acciones nunca estuvieron tan sobrevaluadas en los últimos 17 años, lo que provocaría una fuerte de ganancias.
Pero para que los inversores empiecen a ver que el cambio de tendencia podría ser más profundo que el de una mera corrección técnica, hay que focalizarse más en aspectos políticos y no financieros.
¿Cuál es el gran temor de los mercados?
Básicamente que Trump no sea capaz de gobernar con el margen de maniobra que parecía tener en sus primeras semanas de gestión.
Lo peor es que Donald Trump no es el único factor de volatilidad de Wall Street…
- Siguen los vaivenes del petróleo en este 2017. Cuanto mucho el petróleo crecería 30% hasta los 60 dólares por barril y podría superar los 85 para 2019, pero todo es cambiante.
- El Brexit está por volver. ¿Recordás cómo fue? Un día después de las elecciones, los mercados despertaron con fuertes caídas.
- Tras un largo período de deflación, la inflación repunta en las economías desarrolladas. El mercado de bonos del Tesoro de los Estados Unidos ha repuntado considerablemente desde las elecciones norteamericanas y existe el riesgo a la inestabilidad.
El fantasma más temible de Wall Street
Claro, todo esto podría ser un pequeño inconveniente en el recorrido de la presidencia Trump si lo comparamos con el fantasma más temible: que avance la investigación de la CIA y el FBI respecto a la connivencia supuesta del gobierno ruso en la campaña de Trump.
De confirmarse, seguramente esto se convertiría en un terremoto político tan terrible como el Watergate, que le costó a Richard Nixon la presidencia en 1974.
Si la sospecha se transforma en certeza, es probable que el ánimo de Trum se desinfle y termine totalmente quemado.
¿Habrá un mercado bajista?
En Wall Street sostienen que para que haya un mercado bajista se necesita un rendimiento de 3,5% para los bonos a 10 años del Tesoro.