El Secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Steven Mnuchin, informó que el país no cerrará su economía nuevamente en caso de que se produzca una segunda ola de contagios de coronavirus. “No podemos cerrar la economía de nuevo. Creo que hemos aprendido que si uno cierra la economía está creando más daños”, opinó el funcionario en una entrevista en CNBC.
A mediados de marzo, cuando la pandemia del coronavirus comenzó a propagarse con mayor fuerza en Norteamérica, la administración de Donald Trump decidió implementar medidas de confinamiento para tratar de contener la expansión del virus. Sin embargo, el “lockdown” causó serios daños en la actividad económica y sobre todo en el mercado laboral. Con una tasa de desempleo que alcanzó un pico de 14,7% en abril, los Estados Unidos se encuentran es su peor crisis de empleo desde la Gran Depresión.
Aunque el daño económico fue muy duro para la principal potencia del mundo, las medidas de distanciamiento y prevención lograron estabilizar la cantidad de nuevos contagios durante la última parte de abril y todo mayo. La intención del gobierno estadounidense es aplicar una serie de políticas para que la economía real vuelva a los niveles previos a la crisis sanitaria.
No obstante, en los últimos días se ha registrado un considerable aumento en los casos de coronavirus en estados como Texas y Carolina del Norte, lo que evidencia la posibilidad de un rebrote que elimine todos los avances logrados durante el confinamiento.
Para Mnuchin, el sistema de salud norteamericano se encuentra en mejores condiciones para enfrentar una segunda que hace unos meses. “La buena noticia es que ahora contamos con una gran capacidad para realizar pruebas de diagnóstico y tenemos una gran capacidad hospitalaria. Eso era el gran problema y la razón por la cual el presidente tuvo que cerrar partes de la economía a mediados de marzo”, explicó el Secretario del Tesoro.
El gobierno de los Estados Unidos considera que la economía puede experimentar una recuperación en el corto plazo aunque se produzca un nuevo brote. Sin embargo, para el Banco Mundial (BM), la economía norteamericana no tendrá un repunte en el corto plazo y registrará una contracción del 6,1% del Producto Bruto Interno (PBI) en el 2020.
En sintonía con las previsiones del BM, la Reserva Federal (FED) informó el miércoles a través de un comunicado de prensa que “La actual crisis de salud pública pesará mucho en la actividad económica, empleo e inflación a corto plazo, y plantea riesgos considerables para las perspectivas económicas a medio plazo”.