El tipo de cambio seguirá muy influido en el corto plazo por información sobre la nueva variante de COVID-19 (Ómicron), y anuncios de cambios en el llamado tapering por parte de la FED (disminución de compra de bonos en el mercado o inyección de liquidez).
Los siguientes datos inflación y sus expectativas de mediano plazo, influirán en la percepción de salida de estímulos monetarios de la FED (aumentos en las tasas de interés), apreciando al dólar respecto a la mayoría de las monedas y con ello el peso mexicano.
Los principales riesgos internos que puedan afectar a la moneda mexicana sobre: la discusión en el Congreso sobre la Reforma Energética, la percepción de la aprobación y/o en su caso el actuar de la próxima gobernadora del Banco de México.