Les comenté en 2020 que ya hemos dejado atrás que sólo un hecho relacionado con la pandemia del coronavirus podría dar al traste con la marcha alcista de las Bolsas, que no sería ni siquiera un fuerte incremento del número de contagios ni de fallecidos, ya que eso estaba descontado por el mercado. Concretamente, me refería a un nuevo confinamiento general en invierno con el recrudecimiento del Covid-19.
Las medidas restrictivas parciales impuestas por los países ni afectó a la renta variable ni le afectará, es una realidad. Pero un cierre de nuevo generalizado pondría de nuevo en dificultades a determinados sectores y con ello a sus acciones: bancos (la paralización de las economías incrementaría el temor a un aumento del ratio de morosidad), turismo y hoteles (de nuevo la falta de movilidad afectaría el ratio de ocupación de los hoteles), aerolíneas (gran parte de los vuelos se quedarían en tierra), petroleras (el petróleo caería debido a que la demanda se reduciría notablemente con lo que el margen de las petroleras se vería claramente afectado), cines, parques de atracciones, cruceros, etc.
¿Pero de verdad existe el riesgo de nuevos cierres? Bueno, que se lo pregunten a Reino Unido, en donde la nueva cepa del virus se propaga a una velocidad inesperada, y el sistema sanitario público vuelve a estar en riesgo de terminar desbordado. Y es que el primer ministro británico se ha visto obligado a comunicar en un mensaje televisado un nuevo confinamiento nacional tan estricto como el del pasado mes de marzo.
A nivel internacional podríamos enumerar algunas que sufrirían tales como American Express (NYSE:AXP), JPMorgan (NYSE:JPM), Royal Caribbean Cruises (NYSE:RCL), Norwegian (OL:NORR), American Airlines (NASDAQ:AAL), United Airlines (NASDAQ:UAL), Southwest Airlines (NYSE:LUV), Delta Air Lines (NYSE:DAL), Disney (NYSE:DIS), Six Flags (NYSE:SIX), Cedar Point, Cinemark Holdings (NYSE:CNK), Dave & Buster’s (NASDAQ:PLAY), Caesars Entertainment (NASDAQ:CZR), MGM Resorts (NYSE:MGM).
Una vuelta a confinamientos volvería a animar a una serie de compañías que de nuevo verían cómo se incrementaría la demanda de sus productos y servicios, como compañías de videojuegos, de reparto de comida a domicilio, compras online, videoconferencias, entretenimiento, etc.
Podríamos enumera a Zoom Video (NASDAQ:ZM), Peloton (NASDAQ:PTON), Netflix (NASDAQ:NFLX), HelloFresh (DE:HFGG), Zalando (DE:ZALG), TeamViewer (DE:TMV), Wayfair (NYSE:W), Etsy (NASDAQ:ETSY), Pinterest (NYSE:PINS), Overstock (NASDAQ:OSTK) Amazon (NASDAQ:AMZN), PayPal (NASDAQ:PYPL) , K12 (NYSE:LRN), Teladoc (NYSE:TDOC), Alphabet (NASDAQ:GOOGL), Activision Blizzard (NASDAQ:ATVI), Grubhub (NYSE:GRUB), Adobe (NASDAQ:ADBE), Quibi, Shopify (NYSE:SHOP), Webex, Slack Technologies (NYSE:WORK), Citrix (NASDAQ:CTXS), Equinix (NASDAQ:EQIX), CyrusOne (NASDAQ:CONE), NortonLifeLock (NASDAQ:NLOK), Nintendo (T:7974), Snap (NYSE:SNAP).
No voy a comentar todas, pero a modo de ejemplo…
- Amazon.com (NASDAQ:AMZN): es una de las compañías que mejor ha sabido resistir a la crisis del coronavirus, de hecho varias de sus unidades de negocio están aportando un incremento de los ingresos y se espera que continúe así los próximos años. La clave de Amazon ha radicado en que estaba muy bien posicionada y preparada para adaptarse a los nuevos cambios de hábito en la vida y el consumo de las personas y las empresas con los confinamientos. A raíz de ello, aumentó sustancialmente la demanda de los productos y servicios. A día de hoy tienen unos 70 millones de personas que se han suscrito a Amazon Prime sólamente en Estados Unidos y un hecho importante es su fidelidad. Y por si fuera poco, Amazon está diversificando y ha comprado una empresa farmacéutica online, PillPack hace algo menos de dos años por menos de 980 millones de dólares.
- Boston Beer (NYSE:SAM): la compañía es la dueña de Sam Adams, la popular cerveza que lleva el nombre del patriota de la época colonial. Se trata de la cuarta cervecería más grande de EE.UU. Las medidas restrictivas de movilidad por la pandemia incrementaron el consumo de cerveza en las casas y las ganancias han aumentado constantemente así como los ingresos que pasaron de 330 millones de dólares en el primer trimestre a 492 millones en el tercero.
- NVIDIA (NASDAQ:NVDA): los semiconductores han tenido un buen año 2020 y es una de las compañías a tener en cuenta, no en vano en los resultados del tercer trimestre ha superado con creces las expectativas del mercado. El éxito de la compañía ha sido impulsado por el gran rendimiento de sus dos segmentos principales: juegos y centro de datos. Además, el lanzamiento de nuevas consolas durante la temporada de vacaciones será un punto a favor extra.
Otra opción sería el ETF Invesco QQQ Trust, el quinto fondo más conocido en el mundo con 131.000 millones de dólares bajo gestión. Este fondo sigue al Nasdaq100 y sus estrellas son compañías como Microsoft (NASDAQ:MSFT), Apple (NASDAQ:AAPL) y Amazon. Tiene a su favor que está al margen de compañías financieras. Los gastos son interesantes, únicamente se abonan 20 dólares anuales por cada 10.000 dólares invertidos. El fondo ha obtenido una rentabilidad anual del 15,2% en los últimos 15 años (incluido dividendos). Si nos fijamos en los últimos 5 años logró un 22% anual.
El oro también saldría beneficiado al ser un activo refugio y en tiempos de incertidumbre y preocupaciones los inversores sacan su dinero de la renta variable y lo invierten en refugios como el oro, el franco suizo y el yen japonés, motivo por el cual cuando hay temores, las Bolsas caen y los activos refugio suben. Además, las previsiones de inflación también se incrementarán, hecho que hace que el interés por el oro también aumente. Y es que el oro también sirve como cobertura contra la inflación, y claro, con las ingentes sumas de dinero que se están volcando en las economías, poco a poco asistiremos a una subida del IPC.
Y no sólo eso favorece, tenemos también la debilidad del dólar, ya que existe una relación inversa con el billete verde debido a que el oro cotiza en dólares (cuando el dólar cae, los compradores extranjeros tendrán más poder adquisitivo y por lo tanto, aumentarán la demanda de esos productos, lo que a su vez provocará una subida en los precios de los productos).