La empresa nórdica de servicios públicos Fortum (HE:FORTUM) ha informado de un aumento de los ciberataques y las actividades de vigilancia, incluido el avistamiento de drones y personas sospechosas cerca de sus instalaciones en Finlandia y Suecia. Markus Rauramo, Consejero Delegado de la empresa, ha revelado que este tipo de incidentes se producen a diario y que la empresa se ha puesto en contacto con las autoridades para investigarlos.
Los servicios de seguridad de ambos países han reconocido un repunte de las acciones hostiles de Rusia en los últimos tiempos. Sin embargo, las autoridades finlandesas y suecas no han hecho comentarios sobre incidentes concretos. Del mismo modo, el Ministerio de Asuntos Exteriores o la embajada de Rusia en Helsinki no han respondido a las solicitudes de comentarios.
El aumento de las amenazas a la seguridad coincide con la decisión de Finlandia y Suecia de ingresar en la OTAN, una medida que ha tensado las relaciones con Rusia. Rauramo mencionó que las operaciones de Fortum han sido objeto de intentos de ciberataque diarios y de vigilancia física menos frecuente, como drones. También señaló perturbaciones en las conexiones por satélite de las centrales eléctricas a principios de este año.
Fortum, que explota centrales hidroeléctricas, eólicas, solares, nucleares y de producción combinada de calor y electricidad (CHP), ha aplicado amplias medidas para contrarrestar estas amenazas. Entre ellas figuran un estricto control de acceso, servicios de seguridad privada, sistemas de reserva y simulacros periódicos con las autoridades. Jari Stenius, responsable de seguridad de Fortum, confirmó un aumento de la frecuencia de los incidentes, pero afirmó que el impacto en las operaciones sigue siendo mínimo.
La Oficina Nacional de Investigación finlandesa (KRP) tiene múltiples investigaciones en curso relacionadas con incidentes cerca de infraestructuras críticas. El Servicio de Seguridad e Inteligencia de Finlandia (Supo) y la policía, junto con el Servicio de Inteligencia de Suecia (Sapo), se han abstenido de comentar directamente los ciberataques o identificar a los autores.
El Supo ha identificado a Rusia como la principal amenaza para la seguridad nacional de Finlandia, citando una escalada de ciberataques y operaciones de inteligencia dirigidas contra las infraestructuras críticas del país. Un portavoz de Sapo describió un cambio en las actividades de inteligencia rusas contra Suecia, caracterizado por un aumento de la agresividad y la asunción de riesgos.
El deterioro de las relaciones entre Finlandia y Rusia ha tenido importantes repercusiones. La OTAN y los servicios de inteligencia occidentales han advertido de la implicación de Rusia en un número creciente de actividades hostiles en toda la zona euroatlántica. En respuesta a la adhesión de Finlandia a la OTAN y a las sanciones de la UE, Rusia tomó represalias confiscando el año pasado los activos energéticos rusos de Fortum, valorados en 1.900 millones de dólares.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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