Por Eyanir Chinea
CARACAS, 1 nov (Reuters) - El Gobierno y la oposición venezolana trazaron el lunes una ruta para avanzar en un proceso de diálogo, que los detractores del mandatario Nicolás Maduro están condicionando a la liberación de presos políticos y la convocatoria de elecciones presidenciales.
El domingo en la noche, Maduro estrechó la mano a delegados de la oposición en el inicio formal de las conversaciones entre ambos bandos políticos ante mediadores extranjeros, incluido un representante del Papa Francisco. la reunión, que se prolongó hasta la madrugada, los representantes acordaron establecer mesas de trabajo que iniciaron deliberaciones el mismo lunes sobre cuatro temas: paz, respeto al estado de derecho y la soberanía; derechos humanos y reconciliación; economía y sociedad; y el establecimiento de un calendario electoral.
La próxima reunión será el 11 de noviembre.
"Es una buena noticia para Venezuela que este proceso de diálogo lo logramos y arrancó bien", dijo Maduro la noche del lunes tras reunirse con el enviado del Papa, Claudio Maria Celli, el ex presidente español José Luis Rodríguez Zapatero y el subsecretario de Estado de Estados Unidos, Thomas Shannon.
"Con paciencia, sabiduría y buena voluntad, creo que este proceso de diálogo debe irse encaminando en función del interés común del país y debe ir arrojando buenos resultados", agregó.
"GESTOS CONCRETOS"
A pesar del optimismo oficial, la oposición dijo que no abandonará su programa de protestas. El secretario de la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús Torrealba, agregó que esperan "gestos concretos e inmediatos", como la liberación de "presos políticos" para seguir las negociaciones.
"Fuimos a plantear la necesidad de desbloquear la salida electoral al drama venezolano", dijo Torrealba. "O que se nos devuelva el referendo revocatorio (...) y que se convoque en el 2016, o se establezca un acuerdo político que permita el adelanto de elecciones presidenciales", sentenció.
El árbitro electoral venezolano suspendió el proceso para convocar un referéndum revocatorio contra Maduro, aumentando las crispaciones políticas en el país petrolero, que además sufre una aguda crisis económica de inflación y escasez. paralelo al diálogo, la oposición adelanta un juicio político contra el mandatario en el parlamento, que se volverá a discutir el martes, y convocó a sus seguidores a marchar al Palacio de Gobierno el jueves. adelantó que no acudirá a la sesión de la Asamblea Nacional a la que fue llamado a comparecer, porque considera que el juicio que se le sigue es "ilegal".
Además, el mandatario dijo que mantuvo una reunión "positiva" con Shannon, en la que conversaron sobre el diálogo con la oposición y la necesidad de mantener relaciones de respeto entre ambas naciones, que carecen de embajadores desde el 2008.
Venezuela atraviesa una de las peores crisis de su historia contemporánea que se ha agravado por el desplome de los precios del crudo, su principal producto de exportación.
En ese escenario, el Gobierno venezolano ha buscado que los países petroleros alcancen un acuerdo para congelar su producción y así apuntalar los precios.
El lunes, Maduro pidió a Shannon que Estados Unidos, uno de los grandes productores de crudo, se sume al pacto. (Información adicional de Diego Oré; Editado por Gabriela Donoso)