Por Stephanie Nebehay
GINEBRA, 20 jun (Reuters) - Un récord de 65,3 millones de personas fueron desplazadas el año pasado en todo el mundo, muchas de las cuales huyeron de guerras sólo para toparse con muros, xenofobia y leyes más estrictas al llegar a las fronteras, dijo el lunes la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
La cifra, que saltó desde 59,5 millones en 2014 y se incrementó en un 50 por ciento en cinco años, significa que una de cada 113 personas en el planeta ahora es un refugiado, solicitante de asilo o desplazado interno en su país de origen.
Los conflictos en Siria, Afganistán, Burundi y Sudán del Sur han impulsado el éxodo más reciente, lo que elevó la cifra total de refugiados a 21,3 millones, la mitad de ellos niños, dijo ACNUR en su informe "Tendencias Globales" con motivo del Día Mundial del Refugiado.
"El mensaje que transmiten los refugiados e inmigrantes que cruzan el Mediterráneo y llegan a las costas de Europa es que si no se resuelven los problemas, los problemas vendrán a tí", dijo el Alto Comisionado, Filippo Grandi, en una rueda de prensa.
"Es doloroso que haya tenido que pasar tanto tiempo para que las personas en los países ricos entendieran esto", dijo. "Necesitamos acción, acción política para detener los conflictos, que sería la prevención más importante de los flujos de refugiados", agregó.
Un récord de dos millones de solicitudes nuevas de asilo fueron presentadas en los países industrializados en 2015, según el informe. Casi 100.000 eran de niños no acompañados o separados de sus familias, lo que triplica la cantidad vista en 2014 y representa un máximo histórico.
Alemania, donde uno de cada tres solicitantes de asilo era sirio, va a la cabeza con 441.900 solicitudes, seguida por Estados Unidos, con 172.700, muchos de los cuales huyen de la violencia ligada a las pandillas y el narcotráfico en México y América Central.
Las regiones en desarrollo todavía albergan el 86 por ciento de los refugiados del mundo, encabezadas por Turquía con 2,5 millones de sirios, seguidas por Pakistán y Líbano, según el informe.