Redactor: Cesar Enrique Perez Moreno
Infosel, julio. 25.- El Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México anunció su determinación de suspender cuatro procesos de licitación, de manera indefinida, en tanto no se resuelva el destino de la que sería la obra de infraestructura más importante del gobierno de Enrique Peña Nieto.
La empresa estatal que construye el Nuevo Aeropuerto internacional de México (NAIM) dijo que tomó esa decisión para esperar a conocer los resultados de la evaluación que realizan integrantes del equipo de Andrés Manuel López Obrador, el virtual presidente electo de México.
"Se suspenden de manera indefinida los plazos para celebrar los actos de las licitaciones relativas a la Construcción de Redes Exteriores de Distribución; la Construcción de la Red de Distribución de Combustibles; la Supervisión de la Construcción de la Red de Distribución de Combustibles y el Suministro, Instalación y Comisionamiento de los Sistemas de Iluminación de Pistas (AGL)", dijo el Grupo Aeroportuario, en un comunicado.
Durante su campaña, el ganador de la elección presidencial prometió no continuar con la obra para construir un nuevo aeropuerto, por considerar que esa obra era demasiado costosa para el gobierno y porque tenía sospechas de actos de corrupción en la asignación de contratos.
No obstante, en semanas recientes, el virtual presidente electo mostró una actitud menos antagónica con el proyecto por las recomendaciones que muchos le han hecho sobre la necesidad de ampliar la capacidad operativa de la terminal actual.
Incluso, López Obrador pidió conformar un equipo de expertos que sostuviera reuniones con funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), encabezada por Gerardo Ruiz Esparza, con la intención de evaluar el estado de la obra.
En esa reunión participaron, además de Ruiz Esparza, la subsecretaria de Transporte, Yuriria Mascott Pérez; el director general del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, Federico Patiño; y el director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Roberto Ramírez de la Parra, por la importancia e impacto sobre cuencas hídricas que tendrá la nueva terminal en la zona donde se edifica.
Además, por parte del equipo de López Obrador, estuvieron presentes Javier Jiménez Espriú, quien es el futuro titular de SCT; Carlos Urzúa, el elegido para secretario de Hacienda y Crédito Público; Alfonso Romo, el futuro jefe de la oficina de presidencia; Carlos Noriega, el presidente de la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Amafore); el empresario Eugenio Nájera; el militar en retiro y especialista en asuntos aéreos Jorge Nuño y el ingeniero José María Rioboó.
En esa reunión "se compartió información del estado que guarda la construcción del NAIM y se determinó establecer diversos grupos de trabajo para analizar cuestiones técnicas, sociales, financieras, geológicas y medio ambientales del proyecto".
Hace un par de días, en conferencia de prensa, López Obrador reveló que a mediados de agosto será publicado el dictamen que surja de estas revisiones, donde el grupo de expertos hará recomendaciones del rumbo que debe tomar esa obra.
Todavía están en discusión tres opciones: continuar con el proyecto de nuevo aeropuerto en sus términos actuales; suspenderlo y construir dos pistas en la terminal militar aérea de Santa Lucía, para corregir la saturación del aeropuerto actual a un menor precio; o seguir la construcción de la obra pero más adelante concesionar la operación a empresas del sector privado.
Tras el dictamen, el nuevo gobierno solicitará una consulta con la sociedad para que los ciudadanos se pronuncien sobre el futuro del nuevo aeropuerto.
"Para no equivocarnos lo mejor es preguntar. La tónica del nuevo gobierno va a ser consultar, preguntar, porque el pueblo es sabio, no es cierto que el pueblo no sepa de estos asuntos", agregó López Obrador, en su conferencia de prensa.
Redactor: César E. Pérez
Infosel, julio. 25.- El Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México anunció su determinación de suspender cuatro procesos de licitación, de manera indefinida, en tanto no se resuelva el destino de la que sería la obra de infraestructura más importante del gobierno de Enrique Peña Nieto.
La empresa estatal que construye el Nuevo Aeropuerto internacional de México (NAIM) dijo que tomó esa decisión para esperar a conocer los resultados de la evaluación que realizan integrantes del equipo de Andrés Manuel López Obrador, el virtual presidente electo de México.
"Se suspenden de manera indefinida los plazos para celebrar los actos de las licitaciones relativas a la Construcción de Redes Exteriores de Distribución; la Construcción de la Red de Distribución de Combustibles; la Supervisión de la Construcción de la Red de Distribución de Combustibles y el Suministro, Instalación y Comisionamiento de los Sistemas de Iluminación de Pistas (AGL)", dijo el Grupo Aeroportuario, en un comunicado.
Durante su campaña, el ganador de la elección presidencial prometió no continuar con la obra para construir un nuevo aeropuerto, por considerar que esa obra era demasiado costosa para el gobierno y porque tenía sospechas de actos de corrupción en la asignación de contratos.
No obstante, en semanas recientes, el virtual presidente electo mostró una actitud menos antagónica con el proyecto por las recomendaciones que muchos le han hecho sobre la necesidad de ampliar la capacidad operativa de la terminal actual.
Incluso, López Obrador pidió conformar un equipo de expertos que sostuviera reuniones con funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), encabezada por Gerardo Ruiz Esparza, con la intención de evaluar el estado de la obra.
En esa reunión participaron, además de Ruiz Esparza, la subsecretaria de Transporte, Yuriria Mascott Pérez; el director general del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, Federico Patiño; y el director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Roberto Ramírez de la Parra, por la importancia e impacto sobre cuencas hídricas que tendrá la nueva terminal en la zona donde se edifica.
Además, por parte del equipo de López Obrador, estuvieron presentes Javier Jiménez Espriú, quien es el futuro titular de SCT; Carlos Urzúa, el elegido para secretario de Hacienda y Crédito Público; Alfonso Romo, el futuro jefe de la oficina de presidencia; Carlos Noriega, el presidente de la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Amafore); el empresario Eugenio Nájera; el militar en retiro y especialista en asuntos aéreos Jorge Nuño y el ingeniero José María Rioboó.
En esa reunión "se compartió información del estado que guarda la construcción del NAIM y se determinó establecer diversos grupos de trabajo para analizar cuestiones técnicas, sociales, financieras, geológicas y medio ambientales del proyecto".
Hace un par de días, en conferencia de prensa, López Obrador reveló que a mediados de agosto será publicado el dictamen que surja de estas revisiones, donde el grupo de expertos hará recomendaciones del rumbo que debe tomar esa obra.
Todavía están en discusión tres opciones: continuar con el proyecto de nuevo aeropuerto en sus términos actuales; suspenderlo y construir dos pistas en la terminal militar aérea de Santa Lucía, para corregir la saturación del aeropuerto actual a un menor precio; o seguir la construcción de la obra pero más adelante concesionar la operación a empresas del sector privado.
Tras el dictamen, el nuevo gobierno solicitará una consulta con la sociedad para que los ciudadanos se pronuncien sobre el futuro del nuevo aeropuerto.
"Para no equivocarnos lo mejor es preguntar. La tónica del nuevo gobierno va a ser consultar, preguntar, porque el pueblo es sabio, no es cierto que el pueblo no sepa de estos asuntos", agregó López Obrador, en su conferencia de prensa.
Redactor: César E. Pérez