por Gloria García Díaz
(Actualización con detalles a lo largo de la historia)
Infosel, noviembre. 27.- La continúa incertidumbre sobre las políticas económicas que tomará la próxima administración presidencial de México junto con algunos otros riesgos externos, son elementos que continuarán favoreciendo la posibilidad de que en diciembre el Banco de México (Banxico) suba nuevamente la tasa de interés local, algo que los instrumentos gubernamentales reflejaron en la subasta semanal de hoy.
"Esperamos tasas locales que muestren la expectativa del mercado de condiciones monetarias más restrictivas en México", escribieron en un reporte estrategas del grupo financiero Banorte (MX:GFNORTEO) Ixe.
Desde la última semana de octubre, justo cuando la primera consulta ciudadana realizada por el equipo del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, resultó a favor de la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), las tasas de los valores gubernamentales han alcanzado niveles no vistos en 10 años y en esta ocasión no fue la excepción.
Apenas en la subasta de la semana pasada el bono a 10 años o junio de 2027 fue ofertado en el nivel más alto desde noviembre de 2008, en 9.11%. Hoy el bono a cinco años también alcanza niveles no observados desde esa fecha, al ofrecer un rendimiento de 9.02%, eso es 0.45 puntos porcentuales por encima del nivel de hace cuatro semanas. Ese nivel estuvo 0.06 puntos por arriba del nivel previsto por los analistas encuestados por Infosel.
Mientras que el udibono a 10 años fue vendido en un nivel no vistos desde inicios de marzo de 2009, en 4.39%, eso es 0.24 puntos porcentuales por encima de nivel de hace cuatro semanas.
Los altos rendimientos, que han estado ofreciendo los instrumentos gubernamentales en las últimas cuatro subastas, han sido debido a que en la última reunión de política monetaria de Banxico, el ente financiero demostró un tono "hawkish" o a favor de continuar subiendo la tasa de referencia.
La posibilidad de que Banxico suba la tasa de referencia sin duda dependerá, en parte, de la menor o mayor incertidumbre sobre las medidas económicas que aplicará la siguiente administración presidencial.
Y es que el equipo de López Obrador no ha hecho más que generar nerviosismo en los mercados financieros del país, tan solo el viernes pasado hubo cierta inquietud por la posibilidad de que ahora sea el gobierno, y no las administradoras de fondos para el retiro o afores, quienes manejen el ahorro de los trabajadores.
Además hace algunos días la bancada del Senado del partido de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) causó revuelo en los mercados al anunciar que estaría buscando la eliminación de 12 comisiones bancarias.
Esas, entre otras medidas, que el presidente electo pudiera aplicar en su sexenio sin duda han causado nerviosismo en los mercados financieros del país, reflejo de ello es que en el mercado secundario, la tasa del bono a 30 años o noviembre de 2047 terminó el día en niveles nunca antes vistos desde que fue emitido en marzo de 2017, al ubicarse en 9.83%.
Claro que la moneda nacional también es otro activo que ha resentido la incertidumbre de las acciones del siguiente gabinete. Las presiones sobre la moneda mexicana no resulta ajeno a Banxico ya que ello podría mermar las expectativas de inflación en los meses venideros.
Es así que el Instituto Central seguirá al pendiente de la moneda nacional, que ya desde hace dos semanas opera por encima de 20 por dólar e incluso ayer cerró en su nivel más débil en cinco meses, en 20.63 enteros.
Además los factores externos no parecen ser del todo favorables para que los inversionistas decidan elevar sus apuestas por los valores gubernamentales de México, sino por el contrario pareciera ser que la perspectiva de que la Reserva Federal suba su tasa de referencia en 0.25 puntos porcentuales a finales del año, será un obstáculo que no hará más que poner presión para que Banxico haga lo propio en diciembre.
En este escenario, los instrumentos de corto plazo, los Certificados de Tesorería de la Federación (Cetes), que son más sensibles a las decisiones de política monetaria también fueron ofertados en niveles no vistos desde la crisis de 2008, así por ejemplo, el Cete a seis meses alcanzó un nivel no visto desde 2008, al ser colocado en 8.48%.
Contrario a ello, el Cete a un mes fue colocado en 7.97%, eso es 0.02 puntos porcentuales por debajo del nivel de hace una semana. Además ese nivel estuvo 0.05 puntos por debajo del nivel anticipado por el sondeo de Infosel.
Finalmente, el Cete a tres meses fue vendido en 8.25%, el mismo nivel al cual fue ofertado hace dos semanas.
(Actualización con detalles a lo largo de la historia)
Infosel, noviembre. 27.- La continúa incertidumbre sobre las políticas económicas que tomará la próxima administración presidencial de México junto con algunos otros riesgos externos, son elementos que continuarán favoreciendo la posibilidad de que en diciembre el Banco de México (Banxico) suba nuevamente la tasa de interés local, algo que los instrumentos gubernamentales reflejaron en la subasta semanal de hoy.
"Esperamos tasas locales que muestren la expectativa del mercado de condiciones monetarias más restrictivas en México", escribieron en un reporte estrategas del grupo financiero Banorte (MX:GFNORTEO) Ixe.
Desde la última semana de octubre, justo cuando la primera consulta ciudadana realizada por el equipo del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, resultó a favor de la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), las tasas de los valores gubernamentales han alcanzado niveles no vistos en 10 años y en esta ocasión no fue la excepción.
Apenas en la subasta de la semana pasada el bono a 10 años o junio de 2027 fue ofertado en el nivel más alto desde noviembre de 2008, en 9.11%. Hoy el bono a cinco años también alcanza niveles no observados desde esa fecha, al ofrecer un rendimiento de 9.02%, eso es 0.45 puntos porcentuales por encima del nivel de hace cuatro semanas. Ese nivel estuvo 0.06 puntos por arriba del nivel previsto por los analistas encuestados por Infosel.
Mientras que el udibono a 10 años fue vendido en un nivel no vistos desde inicios de marzo de 2009, en 4.39%, eso es 0.24 puntos porcentuales por encima de nivel de hace cuatro semanas.
Los altos rendimientos, que han estado ofreciendo los instrumentos gubernamentales en las últimas cuatro subastas, han sido debido a que en la última reunión de política monetaria de Banxico, el ente financiero demostró un tono "hawkish" o a favor de continuar subiendo la tasa de referencia.
La posibilidad de que Banxico suba la tasa de referencia sin duda dependerá, en parte, de la menor o mayor incertidumbre sobre las medidas económicas que aplicará la siguiente administración presidencial.
Y es que el equipo de López Obrador no ha hecho más que generar nerviosismo en los mercados financieros del país, tan solo el viernes pasado hubo cierta inquietud por la posibilidad de que ahora sea el gobierno, y no las administradoras de fondos para el retiro o afores, quienes manejen el ahorro de los trabajadores.
Además hace algunos días la bancada del Senado del partido de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) causó revuelo en los mercados al anunciar que estaría buscando la eliminación de 12 comisiones bancarias.
Esas, entre otras medidas, que el presidente electo pudiera aplicar en su sexenio sin duda han causado nerviosismo en los mercados financieros del país, reflejo de ello es que en el mercado secundario, la tasa del bono a 30 años o noviembre de 2047 terminó el día en niveles nunca antes vistos desde que fue emitido en marzo de 2017, al ubicarse en 9.83%.
Claro que la moneda nacional también es otro activo que ha resentido la incertidumbre de las acciones del siguiente gabinete. Las presiones sobre la moneda mexicana no resulta ajeno a Banxico ya que ello podría mermar las expectativas de inflación en los meses venideros.
Es así que el Instituto Central seguirá al pendiente de la moneda nacional, que ya desde hace dos semanas opera por encima de 20 por dólar e incluso ayer cerró en su nivel más débil en cinco meses, en 20.63 enteros.
Además los factores externos no parecen ser del todo favorables para que los inversionistas decidan elevar sus apuestas por los valores gubernamentales de México, sino por el contrario pareciera ser que la perspectiva de que la Reserva Federal suba su tasa de referencia en 0.25 puntos porcentuales a finales del año, será un obstáculo que no hará más que poner presión para que Banxico haga lo propio en diciembre.
En este escenario, los instrumentos de corto plazo, los Certificados de Tesorería de la Federación (Cetes), que son más sensibles a las decisiones de política monetaria también fueron ofertados en niveles no vistos desde la crisis de 2008, así por ejemplo, el Cete a seis meses alcanzó un nivel no visto desde 2008, al ser colocado en 8.48%.
Contrario a ello, el Cete a un mes fue colocado en 7.97%, eso es 0.02 puntos porcentuales por debajo del nivel de hace una semana. Además ese nivel estuvo 0.05 puntos por debajo del nivel anticipado por el sondeo de Infosel.
Finalmente, el Cete a tres meses fue vendido en 8.25%, el mismo nivel al cual fue ofertado hace dos semanas.