La brasileña Petrobras (NYSE:PBR) está a punto de concluir su proceso de diligencia debida para una posible recompra de la refinería de Mataripe, que vendió anteriormente al fondo soberano Mubadala, con sede en Abu Dhabi.
La petrolera estatal está considerando una oferta para recomprar la refinería, que fue vendida en 2021 por 1.650 millones de dólares. El movimiento se alinea con el objetivo del Presidente Luiz Inácio Lula da Silva de revertir la venta de las refinerías de Petrobras e impulsar la inversión en segmentos de la industria que generen empleo.
Aunque el presidente ha manifestado su oposición a la venta de activos de Petrobras, aún no se ha llegado a un acuerdo sobre los detalles de la recompra, como la estructura y el precio. El retraso en la finalización del acuerdo se debe en parte a las diferentes evaluaciones del valor de la refinería, con algunas afirmaciones que sugieren que se vendió por debajo del valor de mercado.
La Contraloría General de Brasil y el sindicato Ineep estimaron el valor de la refinería entre 3.000 y 4.000 millones de dólares en 2021, lo que podría indicar un importante descuento en el precio de venta durante la pandemia.
Las negociaciones sobre una posible recompra comenzaron el año pasado, cuando Mubadala propuso una empresa conjunta para invertir tanto en el refinado tradicional como en una nueva biorrefinería que compartiría infraestructura con la refinería Mataripe. El ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, subrayó que cualquier acuerdo debía ser económicamente viable para Petrobras.
Inicialmente, los planes incluían que Petrobras adquiriera una participación del 80% en Mataripe y realizara una inversión minoritaria en una planta de biocombustibles con Mubadala. Sin embargo, la estructura de esta operación se está revisando desde que el Presidente Lula nombró a un nuevo Director General de Petrobras en mayo.
También se ha hablado de la posibilidad de ofrecer a Mubadala el precio de compra de 2021 más intereses y el reembolso de las inversiones en la modernización de la refinería. En la actualidad, Petrobras opera 11 refinerías, que representan alrededor del 80% de la producción nacional de combustible de Brasil.
La refinería Mataripe, construida en los años 50 y explotada por Acelen, empresa controlada por Mubadala, es la segunda mayor refinería de Brasil. Tiene la mayor capacidad de producción de gasolina, gasóleo y otros derivados del petróleo de las regiones norte y noreste del país.
Al parecer, Mubadala quiere desprenderse de RLAM, ya que inicialmente esperaba que Petrobras vendiera más refinerías, lo que habría reducido su dependencia de Petrobras en cuanto al crudo.
El analista de la industria petrolera Adriano Pires, anteriormente considerado para el puesto de consejero delegado de Petrobras, sugirió que la recompra es lógica, pues ya no tiene sentido que un inversor privado como Mubadala posea una refinería en Brasil, dada la dinámica del mercado y la posición dominante de Petrobras.
Los representantes de Petrobras y Mubadala no han hecho comentarios sobre las conversaciones en curso.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.