por Mercedes del Signo del Rio
Infosel, abril. 15.- El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que hablará con las autoridades del Banco de México para garantizar que los posibles remantes que obtenga el Instituto Central, por la debilidad del tipo de cambio, se destinen al pago de deuda del país.
El Banco de México, al no ser una institución que persiga fines de lucro, tiene la responsabilidad de entregar al gobierno el beneficio financiero que pueda obtener al cierre de un año fiscal, principalmente por la valuación de los activos que tiene.
A raíz de la reciente depreciación del peso mexicano frente al dólar, López Obrador cree que Banco de México podría entregar a las arcas del gobierno un remanente, que por ley deben destinarse al menos 70% al pago de los pasivos del país.
"Hemos tomado la decisión de que esos excedentes se destinen a pago de deuda, pero nos va a ayudar a reducir montos por servicio de deuda y a mantener nuestra política de no aumentar impuestos, de no crear impuestos nuevos, de no aumentar en términos reales los precios de las gasolinas, el gas, del diésel, de la luz", dijo el presidente, en su conferencia de prensa matutina del miércoles.
No es claro cuáles son los remanentes que estima el presidente que podrían presentarse, ya que el año pasado México terminó con una apreciación de su moneda frente al dólar.
De ahí que aparentemente López Obrador cree que en un año podrá obtener los recursos que se logren por la debilidad reciente del peso, que acumula una caída de 20% frente al dólar en lo que va de 2020, por la crisis que está provocando la pandemia del coronavirus covid-19 y por la caída de los precios internacionales del petróleo.
"Eso lo entregan, de acuerdo a la norma, hasta abril del año próximo, pero es como una cobertura. Esto, por la depreciación del peso; o sea, que ahí tenemos un excedente que nos va a ayudar mucho en esta circunstancia, aun cuando se va a disponer hasta abril del año próximo", dijo López Obrador, en su conferencia de prensa matutina. "En esta circunstancia difícil, estamos haciendo todo un esfuerzo para que no aumente la deuda y esta cantidad excedente nos va a ayudar con ese propósito".
La última ocasión en que el banco entregó remanente al gobierno fue en 2017, cuando el Instituto Central transfirió 321 mil 653.3 millones de pesos a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, por el ejercicio fiscal del año previo.
Durante 2016 la moneda nacional perdió cerca de 17% de su valor, por los temores que había de la llegada a la presidencia de Donald J. Trump, por su discurso antagónico con México y con el libre comercio en Norteamérica.
De esos recursos, el 70% o 225 mil 157.3 millones se destinaron al pago de deuda y el restante 30% fue a parar al Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios, como indica la Ley de Responsabilidad Hacendaria.
Para algunos analistas, la depreciación del peso frente al dólar no garantiza que el Banco Central termine con un saldo a su favor en 2020.
"Aún es demasiado pronto para anticipar el resultado para todo el año. Vale la pena considerar también, si una depreciación finalmente se materializa para diciembre, Banco de México tendrá que compensar primero la apreciación de 3.8% del peso registrada en 2019 que tuvo un impacto negativo en el valor de las reservas internacionales", escribió Víctor Gómez, analista con Casa de Bolsa Finamex, en un reporte sobre las declaraciones del presidente. "Además, deberán tomar disposiciones sobre la apreciación potencial durante el próximo año".
Infosel, abril. 15.- El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que hablará con las autoridades del Banco de México para garantizar que los posibles remantes que obtenga el Instituto Central, por la debilidad del tipo de cambio, se destinen al pago de deuda del país.
El Banco de México, al no ser una institución que persiga fines de lucro, tiene la responsabilidad de entregar al gobierno el beneficio financiero que pueda obtener al cierre de un año fiscal, principalmente por la valuación de los activos que tiene.
A raíz de la reciente depreciación del peso mexicano frente al dólar, López Obrador cree que Banco de México podría entregar a las arcas del gobierno un remanente, que por ley deben destinarse al menos 70% al pago de los pasivos del país.
"Hemos tomado la decisión de que esos excedentes se destinen a pago de deuda, pero nos va a ayudar a reducir montos por servicio de deuda y a mantener nuestra política de no aumentar impuestos, de no crear impuestos nuevos, de no aumentar en términos reales los precios de las gasolinas, el gas, del diésel, de la luz", dijo el presidente, en su conferencia de prensa matutina del miércoles.
No es claro cuáles son los remanentes que estima el presidente que podrían presentarse, ya que el año pasado México terminó con una apreciación de su moneda frente al dólar.
De ahí que aparentemente López Obrador cree que en un año podrá obtener los recursos que se logren por la debilidad reciente del peso, que acumula una caída de 20% frente al dólar en lo que va de 2020, por la crisis que está provocando la pandemia del coronavirus covid-19 y por la caída de los precios internacionales del petróleo.
"Eso lo entregan, de acuerdo a la norma, hasta abril del año próximo, pero es como una cobertura. Esto, por la depreciación del peso; o sea, que ahí tenemos un excedente que nos va a ayudar mucho en esta circunstancia, aun cuando se va a disponer hasta abril del año próximo", dijo López Obrador, en su conferencia de prensa matutina. "En esta circunstancia difícil, estamos haciendo todo un esfuerzo para que no aumente la deuda y esta cantidad excedente nos va a ayudar con ese propósito".
La última ocasión en que el banco entregó remanente al gobierno fue en 2017, cuando el Instituto Central transfirió 321 mil 653.3 millones de pesos a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, por el ejercicio fiscal del año previo.
Durante 2016 la moneda nacional perdió cerca de 17% de su valor, por los temores que había de la llegada a la presidencia de Donald J. Trump, por su discurso antagónico con México y con el libre comercio en Norteamérica.
De esos recursos, el 70% o 225 mil 157.3 millones se destinaron al pago de deuda y el restante 30% fue a parar al Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios, como indica la Ley de Responsabilidad Hacendaria.
Para algunos analistas, la depreciación del peso frente al dólar no garantiza que el Banco Central termine con un saldo a su favor en 2020.
"Aún es demasiado pronto para anticipar el resultado para todo el año. Vale la pena considerar también, si una depreciación finalmente se materializa para diciembre, Banco de México tendrá que compensar primero la apreciación de 3.8% del peso registrada en 2019 que tuvo un impacto negativo en el valor de las reservas internacionales", escribió Víctor Gómez, analista con Casa de Bolsa Finamex, en un reporte sobre las declaraciones del presidente. "Además, deberán tomar disposiciones sobre la apreciación potencial durante el próximo año".