Por Anthony Boadle
BRASILIA, 23 mayo (Reuters) - La llegada de un ministro de Relaciones Exteriores de discurso severo en Brasil marca un alejamiento de la diplomacia impulsada por la ideología, que aumentó las tensiones con Estados Unidos en la última década, hacia un mayor impulso para el comercio.
Se espera que la primera visita al exterior de José Serra a Argentina el lunes se centre en la restauración del bloque del Mercosur para su propósito de un área de libre comercio, después de que la entrada de Venezuela en el 2012 lo convirtió en un foro para las políticas de izquierda.
La suspensión de la presidenta de Brasil Dilma Rousseff para enfrentar un juicio político y su sustitución por el centrista Michel Temer han impulsado el péndulo político más hacia el centro en América del Sur, tras la elección de un gobierno de centroderecha en Argentina el año pasado.
"La diplomacia volverá a reflejar los valores de la sociedad brasileña y el interés de su economía, y ya no estará al servicio de las preferencias ideológicas de un partido político y sus aliados en el extranjero", dijo Serra en su primer discurso como ministro la semana pasada.
Su primera medida como ministro de Relaciones Exteriores de Temer fue criticar con fuerza a Venezuela, Cuba, Bolivia, Ecuador y Nicaragua por interferir en los asuntos brasileños, tras describir la suspensión de Rousseff como un "golpe de Estado" ilegal. presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, quien se resiste a las llamadas de la oposición para realizar un referendo que podría sacarlo del poder en medio de una doloresa recesión, llamó a su embajador en Brasilia para realizar consultas.
REACTIVACIÓN DEL MERCOSUR
Serra, de 74 años, es un senador prominente al que le gustaría usar su puesto ministerial como un trampolín para una tercera candidatura a la presidencia. Su éxito puede depender de que cumpla su promesa de abrir nuevos mercados de exportación para la debilitada economía brasileña.
Su ministerio ha recibido una mayor autoridad para negociar acuerdos comerciales. Serra planea aumentar el comercio con mercados tradicionales como Estados Unidos y la Unión Europea, así como otros más recientes como China, que rápidamente se ha convertido en el mayor mercado de exportación para Brasil.
Las relaciones entre Washington y Brasilia se enfriaron durante el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), quien priorizó las relaciones Sur-Sur pero también elevó el perfil internacional de Brasil mientras su economía crecía.
Rousseff, su sucesora, fue menos rígida pero los lazos con Estados Unidos quedaron dañados en 2013 por reportes de espionaje estadounidense sobre Brasil, lo que la llevó a cancelar una visita de Estado a Washington.
Serra dijo que mejorar las relaciones con Estados Unidos era inevitable y que esto dependerá de aliviar las barreras comerciales entre las dos mayores economías de América.
Argentina será fundamental en la renovada búsqueda de comercio de Brasil como principal destino de los bienes manufacturados brasileños. En su interés por revivir el Mercosur, Serra también pedirá a la unión aduanera que sea más flexible con miembros que alcancen acuerdos bilaterales. Sus planes fueron aplaudidos por líderes empresariales. (Reporte de Anthony Boadle; Reporte adicional de Alexandra Ulmer en Caracas. Editado en español por Carlos Aliaga y Lucila Sigal)