(Actualiza con pronósticos trimestrales de inflación y citagobernador banco central)
CIUDAD DE MÉXICO, 28 feb (Reuters) - El banco central deMéxico mantuvo sin cambios sus cálculos para el crecimientoeconómico en 2018 y 2019 y, aunque señaló riesgos para lainflación, destacó que actuará con firmeza para anclar lasexpectativas de mediano y largo plazo hacia su objetivo del 3.0por ciento.
En su informe trimestral de inflación el banco central,conocido como Banxico, dijo que mantiene su previsión decrecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en un rango de2.0–3.0 por ciento, mientras que para el próximo año anticipauna expansión de entre un 2.2 y un 3.2 por ciento.
La entidad monetaria dijo que espera que el índice nacionalde precios al consumidor continúe disminuyendo durante el año,para acercarse ahora al objetivo del 3.0 por ciento +/- un puntoporcentual entre enero y marzo de 2019. Anteriormente, el bancoesperaba que la convergencia se lograra hacia finales del 2018.
Banxico pronosticó una inflación general a tasa anual de un3.8 por ciento para el cuarto trimestre del 2018, para acercarsea un 3.2 por ciento en el primer trimestre del 2019 y alcanzarun 3.0 por ciento en el segundo trimestre de ese año.
"Una afectación como el (incremento) del gas LP en diciembre(...) tiene un efecto que dura en los siguientes meses. Este esuno de los elementos de que (...) se haya diferido la meta(...), pero eso no significa que no tengamos claro que la metaes 3.0 por ciento", dijo más tarde el gobernador del bancocentral, Alejandro Díaz de León, en un programa radial local.
En adelante, el banco central de México publicará susestimaciones trimestrales de inflación tanto para la inflacióngeneral como para la subyacente.
Banxico identificó como riesgos al alza para la inflaciónuna depreciación del peso, nuevos choques en los precios de losbienes agropecuarios, así como alzas significativas en losvalores de los combustibles y la electricidad.
El banco dijo que, hacia adelante, su junta de gobiernovigilará "muy de cerca" la evolución de la inflación, incluyendoel potencial traspaso de las variaciones del tipo de cambio enlos precios, así como la posición monetaria relativa entreMéxico y Estados Unidos y la evolución de las condiciones deholgura en la economía.
"Ante la presencia de factores que, por su naturaleza,impliquen un riesgo para la inflación y sus expectativas, de sernecesario la política monetaria actuará de manera oportuna yfirme para fortalecer el anclaje de las expectativas deinflación de mediano y largo plazo y lograr la convergencia deesta a su objetivo de 3 por ciento", dijo el banco.
Luego de tocar máximos en casi 17 años en diciembre, lainflación interanual se ralentizó y hasta la primera quincena defebrero se ubicaba en un 5.25 por ciento en una tasa interanual.
La entidad monetaria elevó desde finales de 2017 la tasa dereferencia en 50 puntos base para contener las presiones sobrela inflación. El gobernador del banco central, Alejandro Díaz deLeón, declinó hablar sobre los siguientes movimientos depolítica monetaria de la entidad.
"La junta de gobierno ha sido muy cautelosa respecto a laperspectiva que da respecto a las acciones de política monetariahacia adelante", dijo el gobernador en conferencia de prensa.
"En un entorno especialmente volátil como el queenfrentamos, sentimos que el dar una previsión de mediano ylargo plazo en cuanto a las tasas de interés podría no ser lamejor alternativa", añadió.
El banco ve como uno de los potenciales riesgos a laeconomía, una postergación de las negociaciones para modificarel Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), quellevan a cabo actualmente Canadá, México y Estados Unidos. (Reporte de Sheky Espejo, Noé Torres y Adriana Barrera. Conreporte adicional de Sharay Angulo; Editado por Carlos Aliaga)