Infosel, julio. 2.- Empresa automotrices, de autopartes, gobiernos estatales y grupos empresariales han mencionado a México en sus comentarios sobre la propuesta del presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump, de imponer tarifas a la importación de automóviles como una medida de resguardo a su seguridad nacional.
Automotrices como la alemana BMW (DE:BMWG) y la japonesa Toyota Motor (T:7203) --que se han manifestado en contra de las tarifas e importan o planean introducir sus productos desde México-- han destacado la importancia que tiene este país como aliado estratégico para Estados Unidos, no sólo en materia de producción de automóviles, debido a la integración de las cadenas de suministro del sector, sino en materia de la seguridad nacional estadounidense.
"Bajo el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México y Canadá han surgido como parte de una cadena de suministro norteamericana altamente integrada, y también son aliados cercanos de Estados Unidos", dijo Toyota Motor North America, en un comentario enviado al Departamento de Comercio. "México es nuestro aliado más cercano en América Latina y coopera estrechamente con Estados Unidos en cuestiones como la seguridad fronteriza y el control de la inmigración ilegal y el tráfico de drogas".
Productores de autopartes como la canadiense Martinrea, con manufactura en México, también han señalado la importancia de la integración entre proveedores automotrices ubicados en Estados Unidos, Canadá y México y las acciones contraproducentes que tendría la imposición de tarifas para el propio sector estadounidense.
Fuera del ámbito automotriz, asociaciones agrícolas y gobiernos estatales, como el de Alabama, han manifestado públicamente su rechazo a las tarifas debido a las potenciales represalias que México podría imponer, luego de que el país ya estableció un antecedente tras ser incluido en el listado de países a los cuales Estados Unidos cobra aranceles por la importación de acero (25%) y aluminio (10%).
"Los mayores importadores de bienes y servicios fabricados en Alabama fueron Canadá, China, Alemania, México y Japón, todos los países que pueden verse obligados a corresponder en respuesta a cualquier nueva tarifa de importación", escribió la gobernadora de Alabama, Kay Ivey, en una misiva sobre el tema enviada al Departamento de Comercio.
La misma posición es compartida por los gremios agrícolas American Farm Bureau y U.S. Wheat.
Asociaciones comerciales y empresariales como U.S. Chamber of Commerce o Business Roundtable también han alertado sobre el mal uso de las tarifas amparadas en la sección 232 de seguridad nacional como una herramienta de negociación en el marco de la renegociación del tratado comercial entre México y Canada.
"El uso de este estatuto, con su enfoque específico en la seguridad nacional, es totalmente inapropiado", dijo U.S. Chamber of Commerce, en un comentario enviado al Departamento de Comercio. "Funcionarios de Estados Unidos han señalado que su verdadero objetivo es aprovechar esta amenaza arancelaria en las negociaciones comerciales con México, Canadá, Japón, la Unión Europea y Corea del Sur".
Al contrario de estas voces, International Union, United Automobile, Aerospace, and Agricultural Implement Workers of America, el principal sindicato del sector, mejor conocido como UAW, se ha manifestado a favor de establecer medidas especiales contra países como México que atraen a productores automotrices debido a sus bajos salarios.
El Departamento de Comercio, que analiza la situación del sector con miras a imponer tarifas comerciales globales a las importaciones de automóviles y autopartes, abrió un periodo para recibir comentarios sobre su propuesta, que vence esta semana, el 6 de julio. La dependencia sostendrá una audiencia pública sobre el tema el próximo 19 de julio.