Por Laura Sánchez
Investing.com - Tras conocer ayer los datos de IPC de diciembre en Estados Unidos, que subió un 7% tal como esperaba el consenso y que marca un nuevo máximo en 40 años, los expertos comentan qué esperar de la inflación este 2022.
“El escenario que manejan los inversores en estos momentos es uno en el que, por efectos de base de comparación, a partir de enero lo más probable es que la inflación se estabilice o, incluso, empiece a disminuir en las principales economías desarrolladas, en nuestra opinión habrá que esperar a comprobar el verdadero impacto que puede llegar a tener en las cadenas de suministro la nueva ola de la pandemia, protagonizada por la variante Ómicron, ya que la política de ‘tolerancia cero’ con el virus que sigue implementando el gobierno chino está ya provocando el cierre de fábricas y nuevos atascos en los puertos del país”, explican en Link Securities.
“Por otro lado, y si Ómicron se comporta en el resto del mundo como lo ha hecho en Sudáfrica, es factible que, en algunos países, entre ellos el Reino Unido y EE.UU., donde la ola se inició algo antes y en los que todo parece apuntar que ésta a punto de alcanzar su pico, los casos deberían descender muy rápidamente en las próximas semanas. Ello permitiría a estas economías comenzar a recuperar el pulso rápidamente”, añaden estos analistas.
“Tenemos dudas, sin embargo, que en China y en países donde se siguen utilizando los confinamientos de la población como la principal herramienta para luchar contra la expansión del virus, se vaya a producir este patrón, siendo más factible que la ola sea algo más duradera, lo cual no son buenas noticias de cara a la evolución de los precios de muchos productos”, apuntan en Link Securities.
“De momento los inversores parecen confiados en la capacidad de la Reserva Federal (Fed) para contener el brote inflacionista sin dañar en exceso el crecimiento económico. Habrá, por tanto, que estar muy atentos para comprobar si este escenario, que consideramos como el más favorable para los mercados de renta variable, se cumple finalmente”.
En esto mismo coincide Ben Laidler, estratega de mercados globales de eToro: “El dato de inflación respalda la nueva medida de la Reserva Federal de comenzar a subir los tipos de interés ya en marzo, pero también supone un cierto alivio para los mercados".
"La inflación es incómodamente alta, pero es probable que esté cerca de sus niveles máximos y que se reduzca gradualmente a medida que las cadenas de suministro se ajusten y el crecimiento económico se ralentice. Mientras que los inversores ya han pasado a valorar casi cuatro subidas de tipos de interés en EE.UU. este año", dice este experto.
Por su parte, Tiffany (NYSE:TIF) Wilding, economista de PIMCO para América del Norte, señala otro dato de inflación fuerte: el IPC subyacente. “Aunque el ritmo general de la inflación subyacente fue similar al del mes pasado, los detalles subyacentes sugieren cierta estabilización respecto a la reciente reaceleración, lo que es coherente con nuestra opinión de que las cifras de inflación mensual comenzarán a moderarse el mes que viene, y la tasa interanual volverá a tender hacia el objetivo a lo largo de 2022”.
“Las previsiones son que el IPC subyacente alcanzará un máximo en torno al 6% en febrero, antes de moderarse en la segunda mitad del año. Sin embargo, nos centramos cada vez más en los riesgos derivados de los brotes de la variante Omicron. Esperamos que el crecimiento real del primer trimestre se ralentice significativamente debido a la ruptura de las negociaciones sobre el plan Build Back Better y al aumento de los casos de virus en el país. Pero seguimos preocupados por el impacto que otra interrupción de la producción en China y otros proveedores clave podría tener en los inventarios y los precios de los minoristas estadounidenses”, añade Wilding.