Por David Brunnstrom
WASHINGTON, 2 mar (Reuters) - El jefe de las operaciones antinarcóticos del Departamento de Estado de Estados Unidos destacó el jueves la importancia de trabajar con México para controlar el tráfico de drogas entre los dos países, un esfuerzo que ha sido puesto en duda por el plan del presidente Donald Trump de erigir un muro en la frontera.
William Brownfield estimó que más del 90 por ciento de la heroína consumida en Estados Unidos proviene de México, junto con la mayoría de drogas peligrosas como el fentanilo.
La Casa Blanca ha dicho que un muro fronterizo contendrá el narcotráfico, el crimen y la inmigración ilegal, pero México ha advertido que un enfriamiento de las relaciones entre las dos países vecinos podría afectar la cooperación en estos asuntos relevantes.
Brownfield dijo que Estados Unidos estaba ahora en una mejor posición que hace una década para abordar el problema gracias a la cooperación internacional, incluyendo las operaciones conjuntas y el uso compartido de inteligencia con México.
En una conferencia tras la divulgación de un reporte sobre estrategias de control internacional de narcóticos del Departamento de Estado, Brownfield -designado para el cargo por el ex presidente Barack Obama- dijo que la cooperación con México se situaba en "niveles históricamente altos", con un buen pronóstico para el futuro. cierto sentido, hemos desarrollado un muro de cooperación para hacer cumplir las leyes, sin tener que construir físicamente ese muro", dijo Brownfield, secretario adjunto de operaciones internacionales antinarcóticos.
Un 87 por ciento de la cocaína que se consume en Estados Unidos, producida en Centroamérica, llega a través de México y Centroamérica, según un informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) de las Naciones Unidas divulgado el jueves.
Brownfield no respondió directamente cuando fue consultado si el muro ayudaría a detener el flujo de drogas procedente de México, pero dijo que el presidente Trump había dejado claras sus intenciones y que las "oportunidades o herramientas" disponibles serían integradas a los esfuerzos para detener el narcotráfico en la frontera.
"Pero también diría (...) que lo haremos en cooperación con nuestras contrapartes en el Gobierno de México", declaró.
El secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, ha sido particularmente crítico, al decir que si las relaciones entre ambos países se deterioran, el Gobierno mexicano tendría menos razones para cooperar en temas como la inmigración y la contención del narcotráfico. (Reporte adicional de Anahí Rama en Ciudad de México. Editado en español por Marion Giraldo)