México, 8 sep (EFE).- El Gobierno mexicano anunció hoy una propuesta de reforma fiscal que prevé importantes ventajas sociales y que calcula generará el año próximo un incremento de la recaudación del 1,4 % del producto interno bruto (PIB).
La reforma, anunciada por el presidente Enrique Peña Nieto, irá vinculada a un "programa de aceleración del crecimiento económico" que implicará corregir las cuentas del Estado para elevar al 0,4 % del PIB el déficit del gasto público este año y del 1,5 % para 2014, por encima del déficit 0 fijado por el gobernante al comienzo de su mandato, el 1 de diciembre pasado.
En contra de lo que se había anticipado, Peña Nieto precisó que no se aplicará el IVA para alimentos y medicinas, y señaló que la propuesta del Gobierno busca eliminar el Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) y el impuesto a los depósitos en efectivo.
En el plano social, la propuesta del Gobierno asume compromisos políticos previos para fijar un seguro de desempleo y el acceso universal a una pensión a partir de los 65 años.
Peña Nieto hizo los anuncios en un discurso de media hora que pronunció en la Residencia Presidencial de Los Pinos, con la asistencia de altos funcionarios, gobernadores de los estados, legisladores y dirigentes políticos del Gobierno y la oposición.
La reforma fiscal es uno de los pilares de las transformaciones económicas a las que se comprometió Peña Nieto cuando asumió el poder, y sigue a otras presentadas en materia laboral, financiera, educativa y energética.
Peña Nieto añadió que, además del déficit del gasto público del 0,4 % del PIB fijado para este año, el Gobierno propone un déficit del 1,5 % para el 2014, niveles que el presidente insistió en que serían "transitorios".
El programa responde a la desaceleración económica que ha registrado México en el primer semestre de este año y que ha obligado al Gobierno a revisar a la baja su tasa de crecimiento del PIB hasta el 1,8 % para este año, desde un 3,5 % inicial.
Entre los anuncios hechos por Peña Nieto figura su compromiso para mantener en el 16 % el IVA, que siga sin aplicarse esta tasa al transporte urbano, libros y revistas, y eliminar los 3/4 de los tratamientos fiscales preferenciales.
También propone medidas para simplificar la recaudación fiscal, luchar contra la informalidad laboral (dos de cada tres trabajadores mexicanos no están inscritos en el Seguro Social), la gradual eliminación de los subsidios en el precio de los combustibles y un impuesto para los refrescos azucarados. EFE
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