Por Philip Pullella y Byron Kaye
CIUDAD DEL VATICANO/SIDNEY, 1 jun (Reuters) - El Vaticano defendió firmemente el lunes al cardenal australiano George Pell de las acusaciones de un miembro de la comisión del Papa Francisco sobre abuso sexual de que el jefe de finanzas de la Santa Sede tuvo poca consideración con las víctimas.
Peter Saunders, uno de los 17 miembros de la comisión que asesora al Papa sobre cómo erradicar el abuso sexual en la Iglesia, dijo en la televisión australiana el domingo que Pell debería ser destituido por acusaciones de que fracasó a la hora de tomar medidas para proteger a niños.
Pell, que ahora está a cargo de reformar los departamentos económicos del Vaticano, dijo en un comunicado poco después de que el programa se emitiese que los comentarios de Saunders eran "falsos", "engañosos" e "indignantes", y agregó que consultaría a asesores legales.
En un comunicado divulgado por la cadena, Pell dijo que siempre había tomado una postura firme contra el abuso infantil. Negó haber trasladado sacerdotes acusados de abuso entre parroquias u ofrecer a una víctima incentivos para que retirara su acusación.
Las declaraciones de Saunders, uno de los miembros de la comisión más francos, dejaron de manifiesto las tensiones dentro de la Santa Sede sobre cómo lidiar con el abuso sexual cometido por clérigos que ha plagado a la Iglesia por casi dos décadas.
"El cardenal Pell siempre ha respondido atentamente y en detalle a las preguntas de las autoridades australianas", dijo el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi. Las declaraciones de Pell deberían ser "consideradas fiables y merecen respeto y atención".
Saunders, en declaraciones en el programa 60 Minutes Australia del Canal Nueve, dijo sobre Pell: "Está ridiculizando a la comisión papal (sobre abuso infantil), al mismo Papa, pero sobre todo a las víctimas y los sobrevivientes".
Agregó que Pell debería ser "apartado" y enviado de regreso a Australia para enfrentarse a una segunda investigación en el país sobre los abusos, cuyos responsables confirmaron el lunes que pedirán el testimonio del cardenal.
Pero las autoridades de la investigación no fijaron una fecha ni dijeron si tendría que testificar en persona.
(Traducido por la Mesa de Santiago de Chile; Editado por Gabriel Sánchez en Madrid)