México, 6 ago (EFE).- El Senado de México aprobó hoy en lo general el último de los seis dictámenes reglamentarios de la reforma energética que en 2013 modificó la Constitución mexicana para abrir el negocio del gas y el petróleo a las empresas privadas, rompiendo más de setenta años de monopolio estatal.
El dictamen, por el que se reforman, añaden y derogan diversas disposiciones de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (tributaria) y de la Ley General de Deuda Pública, recibió 90 votos a favor y 27 en contra, mientras que no hubo ninguna abstención.
Con la aprobación de este dictamen, que en las próximas horas será refrendado en lo particular y que al igual que los otros cinco ha sido autorizado también por los Diputados, solo falta que el presidente Enrique Peña Nieto promulgue esos reglamentos para poder aplicar la controvertida reforma.