* Mejorará un punto su margen, bajará inversión para reducir deuda
* Espera ventas estables en 2017
* Acción salta un 2,6 pct tras resultados (Añade declaraciones en rueda de prensa)
Por Andrés González y Julien Toyer
MADRID, 23 feb (Reuters) - La multinacional española Telefónica TEF.MC buscará en 2017 subir sus márgenes, desacelerar sus inversiones y generar más caja para bajar su deuda, mientras espera el momento óptimo en el que vender activos que aceleren este proceso.
Tras perder casi la mitad de su Ebitda durante la crisis y salir de varios mercados clave, el grupo acumula deuda multimillonaria que le ha obligado a recortar dividendo y ha ralentizado su apuesta por convertirse en una teleco moderna centrada en datos y contenidos.
Pero el fuerte ritmo inversor, a la baja ahora, y las mejoras operativas comenzaron a dar frutos. En 2016, el Ebitda repuntó un 14,3 en términos reportados (+4,7 por ciento en orgánico) mejorando en todos los grandes mercados.
La cifra de negocio se situó en 52.036 millones de euros y Telefónica reconoció que no ha logrado su objetivo de expandir un 4 por ciento los ingresos, debido principalmente a unas menores ventas de terminales.
El mercado aplaudía los resultados y Telefónica se situaba entre los mejores del sector de telecos en Europa, y el mejor valor del Ibex-35, con un alza del entorno del 2,6 por ciento.
"Esperamos impacto positivo por los mejores datos en EBITDA, la reducción de deuda y la generación de caja, que se debería acelerar de forma significativa en 2017, por las menores inversiones y expansión de márgenes", dijo Sabadell (MC:SABE) en una nota a clientes.
Para este año, espera mantener los ingresos estables respecto a 2016, mejorar un punto porcentual el margen y reducir el ratio capex/ventas hasta el 16 por ciento frente al 17 por ciento actual.
Estas medidas, con la reducción de la inversión, buscan mejorar el flujo de caja libre y que su estrategia de reducir deuda orgánicamente tenga éxito.
El flujo de caja se situó en 4.370 millones de euros, por encima de lo esperado y subiendo a un ritmo del 24,4 por ciento interanual, lo que permitió reducir la deuda hasta los 48.595 millones de euros al cierre del ejercicio.
El grupo confía en seguir creciendo en generación de flujo de caja para desapalancarse.
"Vamos a centrarnos en la generación de flujo de caja y desapalancamiento orgánico (...) pero el M&A, si las condiciones son adecuadas, si crea valor y tiene sentido, jugará un papel", declaró el director financiero del grupo, Ángel Vilá.
VENDER ACTIVOS SIGUE SIENDO UNA OPCIÓN
Precisamente, Telefónica demostró esta política la pasada semana con la venta del 40 por ciento de su filial de torres Telxius a KKR (NYSE:KKR), que hará caer la deuda en otros 1.275 millones, después de haber cancelado una OPV de este activo el pasado año al recibir ofertas inferiores a lo previsto.
El grupo reconoció que podría volver a intentar sacar a bolsa Telxius y una fuente del grupo explicó que, una vez acabe el periodo de lock-up de KKR, el fondo puede pedir a Telefónica que promueva una OPV para poder salir del capital.
Otra palanca para Telefónica sería vender una parte de su negocio británico tras la operación abortada por la UE en 2016, y fuentes conocedoras de los planes de la compañía afirman que podría lanzar una OPV de este negocio más tarde este año.
"Eso no ha cambiado (...) siguen los preparativos para ejecutar alguna de esas operaciones si las condiciones del mercado lo permiten", explicó Vilá respecto a una OPV o venta parcial de O2.
También México puede ser un mercado clave para el grupo en los próximos meses. El mercado mexicano, aunque está mejorando, está siendo muy competitivo y Telefónica no descarta realizar operaciones allí.
"Estamos muy pendientes de cualquier movimiento de consolidación o transformacion del mercado mexicano, creemos que tenemos bazas que jugar en México tanto a nivel orgánico como inorganico si se diera el caso", declaró el presidente del grupo, José María Álvarez Pallete.