Por Luis Jaime Acosta
BOGOTÁ, 6 jun (Reuters) - La "Jamesmanía" explotó en el Mundial de Brasil, en medio de la mejor actuación de la historia de Colombia en el torneo que roba toda la atención del mundo del fútbol. Y ahora, a poco menos de un año de esa ola, el joven centrocampista nacido en Cúcuta quiere extender el amor de sus hinchas a fuerza de buen juego y goles.
James Rodríguez, el ídolo en cuestión, nació cerca de la frontera con Venezuela en 1991 y creció sin su padre, también futbolista, quien se fue de casa cuando él era un niño.
Pero a los siete años ya mostraba sus habilidades y destreza en las canchas de la ciudad de Ibagué, en el centro de Colombia, y en los campeonatos infantiles en los que participaba.
Pasó seis años en una escuela de fútbol perfeccionando sus habilidades para unirse después al club Envigado, con el que debutó a los 14 años en la primera división. Después fue fichado por el Banfield de Argentina, que lo adquirió en calidad de cedido durante dos años a comienzos del 2008.
Rodríguez debutó en el Torneo Clausura 2009 y fue el futbolista extranjero más joven en jugar y marcar un gol en la liga argentina con tan sólo 17 años.
Su puesto natural es el de volante central o de enganche, aunque puede jugar de mediapunta izquierdo o delantero.
Con Banfield fue campeón a los 18 años, y se convirtió en el extranjero más joven en lograr un título en Argentina.
Al año siguiente fue presentado en el Porto del Portugal, y tras brillar con ese club cerró su traspaso al Mónaco en 2013.
Rodríguez jugó un excelente Mundial en Brasil liderando la selección colombiana, y con solamente 22 años fue el eje del juego de su equipo y se consagró como el máximo goleador del torneo con seis anotaciones, llevándose la Bota de Oro. Las celebraciones coreografiadas en la tierra de la samba fueron otra de las imágenes imborrables de la Copa.
ÍDOLO EN COLOMBIA
El futbolista despertó el sentimiento nacionalista durante la Copa del Mundo y una ola de "Jamesmanía" en la que todos los niños y jóvenes amantes del fútbol querían imitarlo luciendo su camiseta con el número 10 y su corte de pelo.
Su ídolo de niño fue Carlos "El Pibe" Valderrama, el legendario número 10 de la selección colombiana, quien después de la Copa Mundo se declaró su admirador y dijo que después de varios años había surgido su sucesor.
"En Colombia siempre estaban buscando el reemplazo del Pibe Valderrama. Yo ahora digo que tenemos el jugador ideal para ese reemplazo y para 10 años más", declaró el ex centrocampista.
"Somos de épocas diferentes. En la mía él era un niño y ahora es nuestra estrella y siempre le seguimos. Somos ídolos compartidos y hacemos fuerza para que siga creciendo y dando alegrías a nuestro país", agregó.
La destacada actuación de James con la selección en Brasil hizo olvidar a los colombianos la ausencia por lesión del delantero Radamel Falcao García, el máximo referente del equipo por sus goles.
En julio del 2014, James fue presentado como nuevo jugador del Real Madrid, en una transacción que sacudió el mercado y por la que el club blanco desembolsó unos 80 millones de euros.
El debut fue con gloria, ya que en su primer partido el Madrid le ganó a Sevilla para conquistar la Supercopa de Europa.
Rodríguez, de 23 años, jugó también la final del Mundial de Clubes de la FIFA frente San Lorenzo de Argentina, que terminó con una victoria 2-0 del conjunto merengue.
A comienzos de 2015 recibió el Premio Puskas y se convirtió en el primer colombiano en ganar este galardón por su gol contra Uruguay en el triunfo en los octavos de final del Mundial.
En febrero fue operado por una fractura en el quinto metatarsiano del pie derecho, que lo tuvo alejado de los terrenos de juego durante dos meses.
Pero rápidamente recuperó su nivel para convertirse en una pieza central del Real Madrid que dirigió hasta hace poco el entrenador Carlo Ancelotti, quien lo elogió prácticamente después de cada partido.
"Es un jugador top. Me ha sorprendido. Tiene un talento increíble. James le ha dado mucha calidad al equipo", dijo el italiano en abril.
James marcó 17 goles con el Real Madrid, incluidos 13 en la liga española y rápidamente se convirtió en uno de los ídolos del equipo al lado de figuras como Cristiano Ronaldo o Karim Benzema.
Y los elogios con la selección colombiana que aspira a ser protagonista en la Copa América tampoco se hacen esperar.
"James ha demostrado en este último tiempo una madurez muy importante para sus 23 años. Ha ido asumiendo las responsabilidades y va siempre creciendo", dijo el técnico de la selección de Colombia, el argentino José Pékerman.