Por Alexandra Ulmer y Mitra Taj
CARACAS/LIMA, 3 oct (Reuters) - Los gobiernos de América Latina lamentaron el lunes el rechazo que dieron los colombianos en un plebiscito al acuerdo de paz con la guerrilla de las FARC, pero instaron a Bogotá a mantener los esfuerzos para dar un corte definitivo al conflicto armado más extenso del continente.
Varios países de la región estuvieron fuertemente involucrados en el plan para poner fin a la guerra de 52 años con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). La Habana fue sede de negociaciones entre las partes por cuatro años, mientras que Chile, la propia Cuba y Venezuela actuaron como garantes y observadores.
La opción por el "No" se impuso el domingo con un 50,21 por ciento de los votos frente al 49,78 por ciento de quienes avalaron el acuerdo, dejando al descubierto la polarización de Colombia sobre el grupo rebelde y la posibilidad de que se integre a la sociedad. mucho, ayer se expresó una minoría, producto de los ataques mediáticos, de la operación de guerra psicológica existente, de la propaganda de guerra", dijo la canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez.
El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, advirtió por su parte en declaraciones a periodistas: "Va ser bien difícil de renegociar, de verdad", el acuerdo de paz.
Otros gobiernos de la región, incluyendo al de centroderecha de Argentina, dijeron que respaldarán un intento por revivir el plan de paz.
"Seguimos estando junto a los Colombianos. El resultado del 'plesbicito'(sic) no significa la restauración del conflicto. Argentina los acompañará", escribió la canciller Susana Malcorra en su cuenta de Twitter. "El compromiso de cese al fuego es fundamental. La paz se construye paso a paso, día a día".
El resultado del referendo dejó en el limbo cuatro años de complicadas negociaciones que culminaron la semana pasada con la firma de un histórico pacto por parte del presidente Juan Manuel Santos y el líder de las FARC, Rodrigo Londoño, alias "Timochenko".
El referendo mostró el rechazo de la sociedad a pactar con los jefes guerrilleros, quienes para muchos traen recuerdos de asesinatos, secuestros y ataques que creen deben ser castigados con la cárcel y sin que se les dé la posibilidad de ocupar cargos públicos.
El acuerdo para poner punto final al conflicto armado más largo del continente que dejó unos 220.000 muertos establecía que los 7.000 combatientes de las FARC dejarían las armas para hacer política, creaba una instancia judicial especial para juzgarlos, establecía subsidios para que se integraran a la sociedad y compensaciones a las víctimas del conflicto.
En una región profundamente polarizada políticamente, también se alzaron voces para celebrar la victoria del "No".
"Si van a reanudarse conversaciones entre el Gobierno colombiano y la guerrilla narcoterrorista deben excluir a los cubanos del proceso", dijo Henry Ramos, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela.
La oposición venezolana estaba en contra de un acuerdo que le daría impunidad a las FARC y que habría sido visto como un triunfo político para el presidente Nicolás Maduro y su aliado cubano Raúl Castro.
<^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^ Principales noticias del plebiscito sobre el acuerdo de paz en Colombia
(Reporte adicional de Diego Oré en Caracas, Caroline Stauffer en Buenos Aires, Lisandra Paraguassu en Brasilia, Alexandra Valencia en Quito, Adriana Barrera y Anahí Rama en Ciudad de México; Editado en español por Javier Leira)