(Actualiza con efectos en resultados de Enel , Engie)
SANTIAGO, 4 jun (Reuters) - Chile iniciará un proceso para eliminar hacia 2040 la generación eléctrica en base a carbón, en una medida destinada a reducir la emisión de gases de efecto invernadero, dijo el martes el presidente Sebastián Piñera.
En un acto con las principales generadoras del país sudamericano, el gobernante conservador detalló que la iniciativa busca deshabilitar en forma gradual cerca de 30 centrales que operan actualmente.
"De aquí en adelante la tendencia fuerte y clara es hacia descarbonizar nuestra matriz energética para poder llegar a bajar en un 20% las emisiones de gases de efecto invernadero en los próximos cincos años", dijo Piñera en un discurso.
La siguiente etapa será "descarbonizar totalmente nuestra matriz hacia el año 2040 y ser un país carbono neutral hacia 2050", agregó.
El mayor productor mundial de cobre ha fomentado en los últimos años el desarrollo de energías limpias para dejar su alta dependencia a los combustibles, encabezados por el carbón, que representa cerca de un 40% de la matriz energética.
El plan, que contempla en cerrar en cinco años las primeras ocho centrales termoeléctricas, se alinea con iniciativas a nivel global de empresas para abandonar la emisión eléctrica en base a carbón. Piñera explicó, sin embargo, que las plantas quedarían temporalmente como reservas estratégicas ante eventualidades.
En Chile operan filiales de las gigantes globales Enel ENEI.MI , Engie ENGIE.PA , AES Corp AES.N y la local Colbún COL.SN .
En una carta al regulador local de valores, Enel Generación Chile ENGX.SN y Gasatacama dijeron que a raíz del acuerdo registrarán una pérdida por deterioro relacionada a las centrales Bocamina 1 y Tarapacá, que afectará el resultado neto de la firma en 2019 por unos 290 millones de dólares.
Por su parte, Engie Energía Chile ECL.SN dijo que sufrirá un deterioro de 63 millones de dólares, mientras que AES Gener ASG.SN dijo que no se producirían efectos en los resultados hasta 2022. (Reporte de Fabián Andrés Cambero. Editado por Marion Giraldo)