Investing.com - En la rueda de prensa posterior a la decisión de tipos del Banco Central Europeo (BCE), el presidente de la institución, Mario Draghi, ha vuelto a comunicar que no será hasta finales del verano de 2019 (lo que el consenso de analistas sitúa en septiembre de 2019) cuando la institución elevará tipos de interés.
También ha confirmado la reducción en su plan de compra de bonos desde los 30.000 millones de euros mensuales actuales hasta 15.000 millones en el periodo octubre-diciembre, finalizando así el QE a finales de 2018.
Draghi ha explicado que las previsiones apuntan a un repunte de la inflación a medio plazo, apoyado en el mantenimiento de una política acomodaticia el tiempo que sea necesario. El presidente del BCE ha insistido en que el crecimiento de la economía de la Zona Euro será más moderado este año, después del las altas tasas de crecimiento registradas en 2017.
El crecimiento, ha insistido Draghi, seguirá dependiendo de demanda interna, del crecimiento del mercado del empleo y de las favorables condiciones de financiación, entre otros factores. Draghi también se ha mostrado confiado en que la demanda interna continúe, impulsando las exportaciones europeas. También ha vuelto a recordar que las reformas estructurales son necesarias para potenciar la competitividad de los países de la Zona Euro.
Preguntado por los periodistas sobre su opinión sobre la reunión mantenida ayer entre el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, Draghi ha reconocido que aún es pronto para analizar las consecuencias, pero ha valorado positivamente la reunión entre ambos líderes. Recordamos que el presidente del BCE alertó recientemente sobre el impacto negativo que podría tener en la UE las políticas proteccionistas y la guerra comercial.