En una reciente sentencia antimonopolio contra Google (NASDAQ:GOOGL) dictada por las autoridades estadounidenses, Apple (NASDAQ:AAPL) puede haber obtenido una ventaja para sus propias batallas legales. Un juez federal se puso principalmente del lado de los fiscales antimonopolio, declarando que el negocio de búsqueda de Google es un monopolio ilegal. Sin embargo, el juez desestimó las alegaciones de que las herramientas publicitarias de Google estaban injustamente diseñadas para beneficiar a Bing, de Microsoft.
Expertos jurídicos, entre ellos Herbert Hovenkamp, de la Facultad de Derecho Carey de la Universidad de Pensilvania, sugieren que la sentencia refuerza el precedente de que las empresas no suelen estar obligadas a facilitar los negocios de sus competidores. Esto podría ser significativo para Apple, que recientemente ha solicitado la desestimación de su caso, argumentando que imponer restricciones a los desarrolladores de terceros no es anticompetitivo y que verse obligado a compartir tecnología inhibiría la innovación.
La demanda desestimada en el caso de Google giraba en torno a la acusación de que Google no proporcionaba funciones esenciales para los anuncios de la competencia a través de su herramienta Search Ads 360. El juez de distrito estadounidense Amit Mehta dio la razón a Google, afirmando que la empresa no está obligada a promover la competencia acomodándose a un rival.
Las implicaciones de esta sentencia son dobles para Apple. Por un lado, si el juez del caso de Google impone una prohibición sobre los pagos de Google a los fabricantes de dispositivos como Apple para mantener su motor de búsqueda como predeterminado, Apple podría perder una importante fuente de ingresos: Google pagó 26.300 millones de dólares en 2021 por este tipo de acuerdos.
William Kovacic, profesor de Derecho de la Universidad George Washington y ex comisionado de la Comisión Federal de Comercio de EE.UU., señaló que, aunque la sentencia es favorable para demandados como Apple, el proceso legal, incluidas las apelaciones, podría prolongarse durante años.
El Departamento de Justicia, en su caso contra Apple, tendrá que demostrar que la conducta de Apple se parece más a los pagos de Google a los fabricantes de dispositivos que a la simple imposición de limitaciones razonables al acceso a la tecnología. El resultado del caso de Google, por lo tanto, podría influir en las estrategias y argumentos del litigio antimonopolio en curso de Apple.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.