Los minoristas de Estados Unidos han importado anticipadamente productos para las temporadas de vuelta al colegio, Halloween y Navidad, lo que podría reducir el impacto de los posibles retrasos en la carga y las pérdidas financieras si los estibadores de los principales puertos marítimos se declaran en huelga en octubre.
La Asociación Internacional de Estibadores (ILA), que representa a 45.000 trabajadores de unos 36 puertos desde Maine a Texas, se encuentra en medio de negociaciones contractuales con los empresarios de la Alianza Marítima de Estados Unidos (USMX), con conversaciones actualmente estancadas sobre cuestiones como la automatización y los salarios.
Jonathan Gold, Vicepresidente de la cadena de suministro y política aduanera de la Federación Nacional de Minoristas, expresó su preocupación por la posibilidad de una huelga en los puertos de la costa este y del Golfo, que gestionan alrededor de la mitad de las importaciones de contenedores del país.
Cualquier interrupción podría coincidir con las elecciones presidenciales estadounidenses. El ILA ha programado una reunión para preparar una posible huelga si no se alcanza un acuerdo antes del 30 de septiembre, mientras que USMX ha manifestado su voluntad de volver a la mesa de negociación.
Grandes empresas como Walmart (NYSE:WMT), Target (NYSE:TGT), Home Depot (NYSE:NYSE:HD) y Amazon.com (NASDAQ:AMZN) comenzaron a importar productos como ordenadores portátiles, disfraces y juguetes ya en primavera, adelantándose al plazo habitual de agosto a octubre para este tipo de importaciones. En julio, las importaciones estadounidenses de mercancías en contenedores experimentaron un aumento del 14% con respecto al año anterior, marcando el tercer nivel mensual más alto para las importaciones estadounidenses de contenedores, según Descartes Systems Group (NASDAQ:DSGX).
Paul Bingham, economista de S&P Global, declaró que este enfoque proactivo ha reducido "absolutamente" el riesgo de una posible huelga portuaria. La importación acelerada también sirve para sortear otras perturbaciones del transporte marítimo, como los ataques de los rebeldes Houthi cerca del Mar Rojo, las restricciones relacionadas con la sequía en el Canal de Panamá y el aumento del riesgo de huracanes. Dado que el sector del transporte marítimo gestiona el 80% del comercio mundial, estas medidas son cruciales.
Bingham también mencionó que la probabilidad de una huelga es baja, especialmente teniendo en cuenta las presiones políticas en un año electoral que empujarán a ambas partes hacia un acuerdo. En caso de huelga breve, Patrick Anderson, Director General del Anderson Economic Group, sugirió que el impacto financiero sería limitado, ya que los cargadores son expertos en la gestión de riesgos.
Sin embargo, reconoció que las empresas específicas que dependen de los envíos afectados experimentarían impactos, mientras que un cierre breve podría no tener un efecto generalizado en gran parte de Estados Unidos.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.