Lufthansa (ETR:LHAG), la aerolínea nacional alemana, se prepara para un descenso de sus beneficios en el tercer trimestre, ya que la compañía se enfrenta a un descenso de los rendimientos y a un aumento de los costes unitarios.
La aerolínea reveló el miércoles que prevé que los rendimientos caigan en un porcentaje de un solo dígito en comparación con el mismo periodo de 2023, y que los costes unitarios aumenten en una proporción similar.
Este descenso previsto de los beneficios se produce en un momento en que las tarifas aéreas en Europa y Asia han empezado a estabilizarse o a disminuir, lo que indica un posible fin del aumento de la demanda de viajes experimentado tras el levantamiento de las restricciones COVID-19.
Este cambio supone un reto para las compañías aéreas, que ya están lidiando con unos costes operativos más elevados y una escasez de aviones disponibles.
Lufthansa ha ajustado sus expectativas de beneficios ajustados antes de intereses e impuestos (EBIT) del tercer trimestre para situarlas por debajo de los 1.500 millones de euros logrados el año anterior. La compañía atribuye el déficit previsto a las dificultades a las que se enfrenta Lufthansa Airlines.
La aerolínea ya había revisado a la baja su objetivo de beneficios a principios de julio, lo que supone el segundo ajuste este año. Los recientes resultados de otras aerolíneas, como Air France-KLM, que incumplió su previsión de beneficios la semana pasada debido al aumento de los costes, y el descenso de los beneficios registrado por Ryanair, indican además un entorno difícil para el sector.
Las acciones de Lufthansa han experimentado un descenso significativo, cayendo aproximadamente un 25% en los últimos seis meses. La aerolínea está trabajando para mejorar su situación financiera a la luz de las actuales condiciones del mercado.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.