Por Carjuan Cruz
Investing.com - Los temores ante una política más agresiva de la Reserva Federal siguen causando estragos; con la disminución en sus compras de bonos impactando la liquidez y un aumento de tasas en puerta, el mercado se deshace de las acciones tecnológicas. Y el panorama negativo para este sector podría continuar, según pronóstico de JPMorgan (NYSE:JPM).
Según Hugh Gimber, vicepresidente de Estrategia de Mercado Global de este banco de inversión, las tecnológicas seguirán siendo las más afectadas, mientras se mantenga esta aversión al riesgo, previendo las consecuencias de esta política más agresiva de la Fed y sus consecuencias en la economía y los mercados.
En efecto, el Nasdaq sufre hoy significativas perdidas, con una dura caída de más de 300 puntos, o 2.42%.
En este entorno de precaución son los sectores cíclicos los que suelen beneficiarse, como la energía o el financiero. "Es probable que vea un liderazgo del mercado de valores bastante diferente al que ha sido tan familiar durante la última década", agrega Gimber.
Al caer el precio de los bonos, sus rendimientos suben, lo que afecta las ganancias a futuro de las tecnológicas, restándole atractivo.
Peor de lo que se cree
El año comenzó descontando los efectos del aumento de tasas de interés en Estados Unidos, prácticamente inminente en marzo, y otros dos o tres en el resto del año. Pero para JPMorgan, las subidas serán incluso más altas de lo que se esperaba.
La nueva variante del Covid-19, Ómicron, provocó una drástica subida de los contagios, e hizo saltar de nuevo las peticiones de subsidios por desempleo la última semana. Lo que por un momento hizo que la tensión cediera en los mercados, por una pequeña probabilidad de que el dato alejara el aumento de la tasa. Pero lejos de implicar algo parecido, JPMorgan apuesta por lo contrario. Según Gimber la tasa máxima podría llegar a 2% o 2.5%.
Otro informe de Goldman Sachs (NYSE:GS) es menos pesimista, este banco de inversión indica que el programa de subida de tasas de interés podría llegar a finales de 2023, con tasas en 1.6%.
Desde el año pasado, la Reserva Federal bajó las tasas de interés a 0, como parte de su política para estimular la recuperación de la economía, después de los cierres y las cuarentenas por la pandemia. Su plan en ese momento se dirigía a subir las tasas, a partir de 2024.
Pero una alta inflación, ya no determinada como transitoria por la Fed, hizo cambiar los planes. Y ahora el comité del organismo estima que es necesario incrementar las tasas en marzo, incluso cuatro veces este año.
Y según indicó Gimber, en cita de Insider, el fin del tapering, sumado al aumento en las tasas de interés, más alto del previsto, impulsará más el rendimiento de los bonos, con los precios de las acciones siguiendo el mismo comportamiento.