En un esfuerzo por hacer frente a la creciente competencia de los fabricantes de automóviles asiáticos, se prevé que Volkswagen registre provisiones de entre 3.000 y 4.000 millones de euros por reducciones de capacidad previstas. Estas provisiones podrían contabilizarse ya en el cuarto trimestre, según la información de la agencia de valores Jefferies, que recientemente pasó tres días con la dirección de la empresa.
Los posibles cierres de plantas, que serían los primeros en la historia de Volkswagen, subrayan la urgencia de la empresa por racionalizar sus operaciones y reducir el gasto. El fabricante de automóviles alemán, conocido por su marca insignia VW, ha estado evaluando diversas estrategias para reducir costes, y el cierre de plantas en Alemania es una consideración importante.
Los analistas de Jefferies destacaron que, tras pasar un tiempo con la dirección de Volkswagen, quedó claro que existe una firme determinación de abordar los problemas de exceso de capacidad sin planes alternativos que eviten la reducción de capacidad. Esta determinación supone un cambio respecto a planteamientos anteriores e indica un giro estratégico del fabricante de automóviles.
El impacto financiero de estas medidas, según las estimaciones de Jefferies, podría suponer para Volkswagen la asunción de provisiones que se traducirían en aproximadamente entre 3.300 y 4.400 millones de dólares, sobre la base del tipo de cambio actual de 1 dólar por 0,9007 euros.
Por el momento, Volkswagen no ha hecho ningún comentario sobre estas observaciones. Las acciones de la empresa en los próximos meses serán seguidas de cerca mientras navega por los retos de un competitivo panorama automovilístico mundial.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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