BUENOS AIRES, 31 oct (Reuters) - La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner se presentó a declarar con el apoyo de una muchedumbre el lunes ante la Justicia de Argentina, en una causa por corrupción que podría empañar su futuro político pese al respaldo popular que aún tiene.
Fernández fue convocada por el juez federal Julián Ercolini en una de los casos que avanzan en la Justicia para determinar si la ex mandataria de centroizquierda, que dejó el poder en diciembre, fue parte de un mecanismo de corrupción que favorecía a empresarios cercanos al poder al licitar obras públicas.
La líder peronista, que está imputada en la causa, se consideró en el pasado víctima de una persecución política, por la que responsabilizó al Gobierno de su sucesor, el presidente liberal Mauricio Macri.
"Yo veo una intención obviamente de persecución política", señaló a periodistas el ex ministro de Economía del Gobierno de Fernández, Axel Kicillof, que se acercó el lunes a los tribunales federales, en Buenos Aires.
Otros funcionarios de su Gobierno, como el ex ministro de Planificación, Julio De Vido, deberán declarar esta semana ante la Justicia por la misma investigación.
Tras ocho años de su gestión y cuatro de su difunto marido, Néstor Kirchner, Fernández es actualmente una de las principales líderes de la oposición, que está encabezada por un peronismo atomizado que buscará derrotar al oficialismo de Macri en las elecciones legislativas del 2017.
Aunque las acusaciones por corrupción le restan respaldo a la ex presidenta, muchos consideran también que la hacen ver como una víctima ante la opinión pública y la favorecen al ubicarla en el centro de la escena política.
Con banderas de Argentina y de agrupaciones peronistas y de izquierda, miles de argentinos se acercaron al palacio de Justicia para respaldar a Fernández.
(Reporte de Nicolás Misculin, Editado por Ana Laura Mitidieri)