SANTIAGO, 28 oct (Reuters) - El presidente chileno Sebastián Piñera preparaba el lunes un cambio en su gabinete de gobierno mientras persistían las convocatorias de protestas en el país sudamericano, sumido en su mayor crisis política desde el retorno a la democracia.
La crisis detonada por un alza en el transporte subterráneo, que ha dejado al menos 17 muertos y miles de detenidos, llevó al mandatario a pedir perdón y anunciar algunas medidas como alza de pensiones, congelar alzas de transporte y electricidad; lo que no ha calmado el ánimo de los manifestantes.
"Que vea lo que dice el pueblo, que escuche. Algo se puede hacer. No ha anunciado nada concreto todavía (...). Esto no termina, esto va a seguir", dijo Jorge Sepúlveda, un conductor de camión de 33 años.
Por redes sociales se multiplicaban llamados a distintas movilizaciones durante la semana, incluyendo una la tarde del martes frente al palacio de gobierno de La Moneda.
Medios de comunicación han publicado que el ajuste del tren ministerial incluiría puestos clave como los ministros de Hacienda y el controvertido titular de Interior, Andrés Chadwick, quien ha sido el mayor blanco de críticas en las recientes manifestaciones.
Parlamentarios opositores han revelado sus planes de buscar la inhabilitación de Chadwick para ejercer cargos públicos.
Una misión enviada por la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, la expresidenta chilena Michelle Bachelet, iniciaba el lunes una visita al país para conocer sobre las denuncias de abusos por parte de las fuerzas de seguridad durante los días que rigió el estado de emergencia, que fue levantado el domingo.