(Agrega detalles)
Por Denis Pinchuk y Christine Kim
VLADIVOSTOK, Rusia/SEÚL, 6 sep (Reuters) - Resolver la crisis nuclear de Corea del Norte es imposible sólo con sanciones y presiones, dijo el miércoles el presidente ruso, Vladimir Putin, tras reunirse con su homólogo surcoreano, e instó nuevamente al diálogo para lograr avances.
Putin se reunió con Moon Jae-in en una cumbre económica en la ciudad de Vladivostok, en el este de Rusia, ante las preocupaciones internacionales por que su vecino común planee más pruebas de armas, posiblemente un lanzamiento de misiles de largo alcance antes de un importante aniversario este fin de semana.
Putin denunció el sexto y más potente ensayo a la fecha de una bomba nuclear de Pyongyang el domingo, diciendo que Rusia no reconocía el estatus nuclear de Corea del Norte.
"El programa de misiles y nuclear de Pyongyang es una vulgar violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, debilita el régimen de no proliferación y crea una amenaza para la seguridad del noreste de Asia", dijo Putin en una rueda de prensa conjunta.
"Al mismo tiempo, está claro que es imposible resolver el problema de la Península Coreana sólo con sanciones y presiones", agregó. El presidente ruso añadió que no se podría avanzar sin herramientas políticas y diplomáticas.
El surcoreano Moon, que llegó al poder a principios de este año abogando por un compromiso con Pyongyang, está cada vez bajo más presión para que adopte una posición más dura respecto a Corea del Norte.
Moon pidió a la ONU que considere nuevas sanciones contra Corea del Norte tras la última prueba nuclear. Diplomáticos dijeron que el Consejo de Seguridad de la ONU podría considerar una prohibición a las exportaciones de textiles de Corea del Norte, prohibir su aerolínea o detener los envíos de petróleo al Gobierno y a los militares norcoreanos.
Las sanciones han hecho poco por impedir que Corea del Norte aumente su capacidad nuclear y de misiles en plena confrontación con el presidente estadounidense, Donald Trump, quien ha prometido que impedirá que Pyongyang tenga la capacidad de atacar el territorio continental estadounidense con un arma nuclear.
Técnicamente, Corea del Sur y Estados Unidos aún están en guerra con Corea del Norte después de que el conflicto de Corea de 1950-1953 terminó en una tregua y no en un tratado de paz. (Reporte adicional de Soyoung Kim en Seúl, Stephanie Nebehay en Ginebra, William Mallard y Kaori Kaneko en Tokio, Christian Shepherd y Michael Martina en Pekín; escrito por Lincoln Feast. Traducido por la Redacción de Madrid; editado por Carlos Aliaga/Patricio Abusleme vía Mesa Santiago)