Pese a las malas noticias que se siguen recibiendo en el país, los mercados financieros parece que tienen una “coraza” que los protege. Primero conocimos la baja en la expectativa de crecimiento económico para este año por parte de la SHCP, después vimos la baja en la perspectiva de la nota de México por parte de Standard & Poor’s, así como la de los bancos y aseguradoras, y este jueves conocimos los resultados de la Balanza de pagos en México, correspondiente al segundo trimestre del año, donde la cuenta corriente de la balanza de pagos mostró un déficit de US$7,852 millones, superando los US$7,017 millones estimados por la encuesta de Bloomberg. De esta forma, el déficit de la cuenta corriente se ubicó en 3.0% del PIB, y aunque solo creció una décima con respecto al 2.9% registrado en el mismo periodo de 2015, la preocupación se debe a la tendencia creciente.
La inquietud a lo anterior, también la mostraron diversos empresarios, entre ellos el presidente del Consejo de Administración de Cemex (MX:CMXCPO), quien consideró que el cambio de perspectiva en la nota de México de Standard and Poor's y un menor crecimiento de la economía mexicana son malas noticias. Otros empresarios señalaron que el gobierno federal debe ser disciplinado y cumplir con lo que prometió sobre un control de la deuda y no incrementarla para evitar que las calificadoras reduzcan la nota del país. Aunque los niveles actuales de deuda todavía son manejables, es preocupante que siga creciendo.
Este jueves, el Indice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la Bolsa, logró mantenerse prácticamente sin cambio al cerrar en 47,734.2 puntos, con una pérdida de 0.02%, mientras que los tres principales índices del mercado neoyorquino tuvieron una caída de 0.14% en promedio.
También el peso logró recuperar 8 centavos al cerrar sus operaciones en $18.40, mientras que el dólar se mantiene estable. Para este viernes, la expectativa de los inversionistas estará en los comentarios de Janet Yellen, en Jackson Hole.