Las acciones de Visa (NYSE:V) están generando retornos más que atractivos para los inversionistas: el activo acumula una ganancia superior al 35% durante el último año, y cotiza cerca de sus máximos históricos de precios, en la zona de 106 dólares por unidad.
Analizamos los factores detrás de esta performance para el gigante de las tarjetas de débito y crédito, así como también los principales niveles de precio a seguir de cerca en el mediano plazo.
Un negocio atractivo
Visa es el líder indiscutido en el mercado de tarjetas de débito y crédito a escala global. En base a datos de WalletHub, la compañía cuenta con una participación del 52,8% en el mercado. El segundo lugar en la industria es ocupado por MasterCard (NYSE:MA), con una participación del 31,6%. Bastante detrás, American Express (NYSE:AXP) y Discover Financial (DFS) cuentan con un 7,5% y 8,1%, respectivamente.
Reconocimiento de marca, escala de negocios y fuerte presencia global son algunos de los factores que hacen de Visa un jugador único en un mercado que ofrece algunas características especialmente atractivas en cuanto a crecimiento y rentabilidad.
Se calcula que más de un 80% de todas las operaciones comerciales en el mundo se cancelan todavía en efectivo. Esto implica un potencial abundante de expansión para empresas como Visa, las cuales se benefician de la transformación en la industria de medios de pagos a medida que el plástico y los medios digitales reemplazan al papel en los próximos años e incluso décadas.
Además, buena parte de los costos en el negocio son relativamente fijos, entonces, las ventas suelen aumentar más rápidamente que los costos, lo cual permite incrementar los márgenes de rentabilidad en el tiempo. El margen operativo de ganancias durante el período de 12 meses terminado en junio asciende a más de 65% sobre la facturación, un nivel de rentabilidad que no suele encontrarse en el mercado.
Otro factor verdaderamente extraordinario es la consistencia de Visa en lo que respecta a superar las estimaciones de ganancias del mercado: las ganancias por acción de la compañía estuvieron por encima de los pronósticos en todos los trimestres desde el año 2013.
Sólida performance financiera
El último reporte de resultados de la compañía no fue para nada la excepción. Visa reportó ventas por 4.560 millones de dólares durante el trimestre terminado en junio, un dato que representa una tasa de crecimiento interanual del 25,6%, en buena medida debido a la consolidación de las operaciones de Visa en Europa durante el trimestre. La facturación de la empresa superó las expectativas de los analistas en 200 millones de dólares.
La cantidad total de transacciones durante el trimestre fue de 42.139 millones de operaciones. Un 66% de este total corresponde a tarjetas de débito y el 34% restante a tarjetas de crédito. El dato refleja un crecimiento del 20% frente al mismo trimestre en el año anterior.
El total de tarjetas en circulación creció un 28%, alcanzando los 3.155 millones de unidades; esto incluye 1.060 millones de tarjetas de crédito y 2.096 millones de unidades en tarjetas de débito.Las ganancias por acción superaron los pronósticos de los analistas: la compañía reportó ganancias de 0,86 por unidad contra un estimado promedio de 0,81 por acción. En una señal de optimismo, el management de Visa anticipa un crecimiento del 20% en las ganancias por acción durante el año en curso.
Niveles clave de precios
Los analistas de Wall Street pronostican en promedio ganancias de 3,43 dólares por acción para Visa en 2017 y 4 dólares por papel en el año 2018. En base a estas estimaciones, las acciones cotizan a un ratio precio ganancias de 31 veces las ganancias esperadas en el año en curso y de 26,5 veces los resultados anticipados para el año próximo.
Se trata de una valuación demandante en comparación con el resto del mercado. Como referencia, el promedio de las compañías en el índice S&P 500 cotiza a un ratio precio ganancias de 20,5 veces los resultados esperados para el próximo año.
Considerando la calidad del negocio, su posición de liderazgo en un mercado con atractivo potencial y la sólida performance financiera de Visa, la valuación no resulta necesariamente excesiva. Por otro lado, es importante reconocer que el precio actual no deja demasiado margen para amortiguar malas noticias en caso de que los números en los próximos trimestres no estén a la altura de las expectativas.
En febrero de este año, las acciones de Visa rompieron al alza la resistencia de 84,3 dólares por unidad, encarando una clara tendencia alcista que se encuentra vigente hasta hoy. Con el activo cotizando cerca de sus máximos históricos, la salud de la tendencia ascendente de precios se encuentra fuera de discusión.
En cuanto a posibles soportes de precios, la zona de 102,4 dólares ha sostenido las cotizaciones en múltiples ocasiones a partir de agosto, por lo tanto, se trata de un nivel importante desde este punto de vista.
En la medida en que el precio respete este soporte y se mantenga además por encima de la línea de tendencia alcista, la acción de precios en Visa es claramente favorable para los compradores.
Fuente: DIF Markets