La mayoría de los mercados bursátiles de la región tuvieron una jornada negativa el jueves, incluyendo al mercado neoyorquino donde sus tres principales índices bursátiles terminaron perdiendo 0.17% en promedio, destacando la caída de 1.9% de las acciones de Walmart (NYSE:WMT) debido al reporte de sus ventas mismas tiendas del 1T18, por debajo de expectativas, aun cuando las ventas a unidades totales y las utilidades superaron expectativas. También se le atribuye el ajuste a la incertidumbre sobre un acuerdo comercial entre EUA y China.
En México, la Bolsa tuvo una fuerte caída el jueves al cerrar el Indice de Precios y Cotizaciones (IPC) en 45.787.9 puntos, con una pérdida de 1.36% ante la caída de 631,9 puntos, con poco volumen negociado, de solo 146 millones de acciones del IPC y 215.5 millones del mercado accionario local. La caída de la Bolsa y el poco volumen negociado demuestra el poco interés de los inversionistas aun cuando hay emisoras sub valuadas y sobre vendidas. La caída que tuvo la Bolsa el jueves se le atribuye a la falta de un acuerdo concreto en las negociaciones del TLCAN, ya que estaba previsto que podrían concluir el día de ayer (17 de mayo). Sin embargo, funcionarios de los tres países ven posible que concluyan durante el resto de este mes.
En el mercado de divisas, el dólar americano mantuvo su apreciación sobre la mayoría de las divisas del mundo, cerrando el índice DXY en 93.39, con una ganancia de 0.12%, mientras que en México, el peso perdió 8.7 centavos, equivalentes a -0.44%, cerrando en $19.6815 según Banxico, aunque posteriormente alcanzó niveles de $19.75.
Con la apreciación del dólar, los bonos de EUA también siguieron subiendo en su rendimiento, alcanzando los treasuries de 10 años de 3.115%, en tanto que en el mercado local, los Mbonos cerraron con bajas de 2 puntos base en la parte más corta de la curva y alzas de 2 puntos base en la parte media y larga de la curva.
Por su parte, el Banco de México mantuvo sin cambio sus tasas de interés en su reunión de política monetaria, aunque mantiene el balance de riesgos al alza para la inflación y a la baja para la economía.