El buen dato del sector laboral en Estados Unidos, la expectativa de un mayor estímulo para alentar el financiamiento de pequeñas y medianas empresas, y la expectativa de un acuerdo comercial entre China y Estados Unidos, mantuvieron las ganancias de la mayoría de los índices bursátiles del mundo. Sin embargo, la bolsa de México brilló el viernes sobre prácticamente todas las bolsas del mundo, al registrar una ganancia de 2.4%, con lo que acumuló en la semana un rendimiento de 3.95%, siendo este último el más alto que ha tenido desde el 9 de diciembre de 2016 cuando ganó 5.29%, aunque hace un año aproximadamente, ganó 3.91%.
El alza del índice S&P/BMV IPC a 44,989.9 puntos el viernes, estuvo apoyado por un volumen de 224.5 millones de acciones del IPC, y 330.2 millones del mercado accionario local. Sin embargo, ante el alza observada, la mayoría de los indicadores técnicos mantienen señales positivas, pero vemos una resistencia fuerte alrededor de los 45,450 puntos donde está su promedio móvil de 200 días, además porque la reciente alza ha generado niveles de sobre compra en el índice de fuerza relativa (RSI).
En Estados Unidos, el mercado neoyorquino mantuvo las ganancias el viernes, aunque en forma más moderada que México, logrando un rendimiento promedio diario de 0.38%, y 2.23% en la semana.
Para esta semana, los mercados estarán a la expectativa de las minutas de la FED sobre la última reunión de política monetaria, y del inicio de los reportes financieros del 1er trimestre del año, destacando el viernes los de JPMorgan (NYSE:JPM) y Wells Fargo (NYSE:WFC), para los que los analistas esperan caída en sus utilidades, lo que podría frenar el “rally alcista”.
En el mercado de divisas, el peso mexicano siguió fortaleciéndose hasta el viernes, cerrando en $19.08, con ganancia de 0.45% y de 1.71% en la semana, apoyado por la entrada de capitales al mercado de dinero, donde el rendimiento del Mbono de 10 años bajó el viernes a 7.93%, desde 8.01% en la semana.