Lo que está por ocurrir en tan solo 10 días en Argentina es determinante para el futuro de todos los habitantes del país, ya que entre todos nos plantearemos las posibilidades de continuar con el deterioro económico del “modelo económico” del kircherismo, o la posibilidad de generar una alternancia, un cambio, y de esta manera permitir que una nueva administración le de aire nuevo a nuestra economía, generando un nuevo ciclo económico de expansión y crecimiento.
Mas allá de cualquier opinión política y económica, el mercado financiero argentino también se juega una carta importante el 22 de noviembre próximo. Justamente desde noviembre de 2012, el Merval –el indicador de acciones líderes de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires- viene generando una importante suba desde niveles cercanos a los 2.100 puntos hasta los valores actuales, por encima de los 13.000, todo ello bajo la expectativa de un posible cambio en la nueva administración.
Ahora bien, el tiempo pasa y esa especulación va a quedar consumada este próximo domingo, y finalmente, lo que las acciones argentinas comenzarán a especular ya no es con un cambio (si es que éste finalmente ocurre), sino con la realidad económica del país.
Vale la pena preguntarse: La realidad económica argentina, ¿significa 13.000 puntos del Merval? ¿Comenzará el mercado a pricear fundamentals a partir de ahora? Claramente, hasta ahora no lo hizo por más que se entienda que en 2012 las acciones argentinas estaban regaladas. Y finalmente, en el caso en que el Merval comience a especular en base a fundamentals, ¿eso es bueno o malo? Puede ser bueno ya que el potencial económico que tiene nuestro país es importante y consideramos que tenemos mucho para ganar en el futuro, ya que tras cuatro años de no crecimiento, el potencial de avance en el próximo gobierno es importante.
Sin embargo, de forma inmediata, vemos que la alta inflación, la falta de dólares y el problema cambiario, así como el déficit energético, la falta de inversiones y el crecimiento, podrían generar inconvenientes para seguir pensando en un avance en forma directa para los próximos años.
En las últimas semanas, el mercado ha mostrado una suba importante que por momentos se torna vertical y la mayoría de las acciones hace caso omiso a la alta sobre-compra, y tal dato técnico seguramente generará tarde o temprano un ajuste, para el cual habrá que estar preparado.
Luego de las elecciones seguramente tengamos otro mercado, un mercado que no tenemos desde 2012, ya que las especulaciones y la realidad seguramente comiencen a cambiar.
La especulación de muchos hoy en día pasa por mantenerse comprado de cara a las elecciones del 22 de noviembre. El que compró y sigue en el mercado, no vende. El que no compró, aprovecha un leve recorte para entrar, y en ese contexto, el mercado no genera importantes
ajustes.
El análisis de fondo es mantenerse bajo la estrategia “comprar con el rumor y vender con la noticia”. ¿Será el resultado electoral la noticia final de cambio y sobre el cual el Merval viene especulando desde 2012?
Nosotros seguimos pensando en el potencial alcista que tiene la bolsa argentina y consideramos que aún, y pese al enorme rally que tuvieron las acciones locales, se pueden hacer inversiones de cara a los próximos años. Si eso finalmente ocurre, seguramente tengamos un ajuste importante luego de las elecciones, aunque el mismo será entendido como una oportunidad de compra de mediano plazo, continuando con el ciclo alcista de la bolsa local para los próximos años.