El oro cerró la sesión pérdidas, cotizando en 1,251.26 dólares por onza, lo cual equivale a un retroceso de 0.47%. Este retroceso se debió a un fortalecimiento del dólar estadounidense, así como a la expectativa de un mayor incremento en la tasa de referencia de la Fed. El fortalecimiento del dólar y el incremento en la probabilidad implícita de un aumento en tasas se dio luego de que el Presidente de Estados Unidos dijera en la Casa Blanca que planea aumentar el gasto en defensa y autorizar más proyectos de infraestructura.
No obstante, durante la sesión el oro alcanzó un nuevo máximo no visto desde noviembre del 2016 de 1,264.18 dólares por onza. En lo que va del año, el oro ha aumentado en 8.59%, debido al incremento en la aversión al riesgo e incertidumbre causado por la incertidumbre políticas en Europa y la nueva administración estadounidense. A pesar de este retroceso, es altamente probable que el precio del oro continúe incrementando.
El cobre finalizó la sesión con ganancias marginales, mostrando un incremento de 0.15%, cotizando en 5,924 dólares por tonelada métrica. Las presiones al alza para el metal continúan siendo las preocupaciones sobre la oferta del cobre, debida a que las principales dos minas productoras de cobre en el mundo continúan cerradas. Desde el 10 de febrero, cuando la mina la Escondida en Chile y la de Grasberg en Indonesia detuvieron su producción, los inventarios de cobre del mundo han retrocedido. De acuerdo con información de Bloomberg, los almacenes seguidos por el London Metal Exchange, Shanghái Futures Exchange y COMEX han retrocedido en 3% a 608,749.66 toneladas métricas.
Es altamente probable que el cobre muestre fuertes presiones al alza durante la sesión de mañana debido a los comentarios del presidente de Estados Unidos al asegurar que buscará incrementar el gasto en defensa en 54 mil millones de dólares.
Por su parte, el maíz y el trigo finalizaron la sesión con pérdidas, ante la expectativa de una menor demanda de los granos a nivel mundial. El maíz cerró con un retroceso de 1.03%, cotizando en 3.60 dólares por bushel, mientras que el trigo terminó cotizando en 4.18 dólares por bushel, lo cual equivale a un retroceso de 2.90%.
Por su parte, las presiones a la baja para el trigo fueron impulsadas debido a que la cantidad del grano listo para ser exportado de Estados Unidos disminuyó. De acuerdo con el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), hasta el 23 de febrero la cantidad de trigo listo para ser exportado de los puertos estadounidenses se redujo en 3.64% a 537.88 mil toneladas métricas. Es importante mencionar que Estados Unidos es el mayor exportador de maíz y trigo del mundo, por lo cual una menor exportación significa que existe una menor demanda.
Es importante mencionar que de acuerdo con el Commodity Futures Trading Commission (CFTC), las posiciones especulativas a favor del maíz hasta el 21 de febrero mostraron un incremento de 8.03% a 92,216 contratos. Asimismo, el CFTC publicó que las posturas especulativas en contra del trigo hasta el 21 de febrero cayeron en 31.62% a 27,385 contratos.