El oro finalizó la sesión mostrando un retroceso de 0.92%, cotizando en 1,205.79 dólares por onza, ante un fortalecimiento del dólar estadounidense frente a la mayoría de sus cruces. Asimismo, las presiones a la baja para el metal precioso se debieron a la publicación de la inflación estadounidense, la cual mostró un incremento de anual de 2.1%, en línea con lo esperado por el mercado, siendo el incremento anual más alto desde junio de 2014. La publicación de dicho indicador trajo de regreso las especulaciones sobre la expectativa de una subida a la tasa de referencia. En una conferencia, Janet Yellen continuó reiterando que la economía se encuentra cerca de máximo empleo y que la inflación se mueve hacia el objetivo de la Reserva Federal.
Sin embargo, a pesar del retroceso en el precio, el oro ha incrementado en 4.64% desde el inicio del año. El aumento en la aversión al riesgo, los comentarios agresivos de Trump en contra de economías como la mexicana y la china, así como la falta de comentarios sobre el incremento fiscal y el plan de infraestructura, han causado dicho incremento.
El cobre finalizó la sesión recortando sus pérdidas, mostrando un incremento de 0.16 %, cotizando en 5,740.50 dólares por tonelada métrica, luego de haber mostrado un retroceso durante los primeros dos días de la semana de 2.59%. Los participantes del mercado continúan mostrando cautela ante la toma de protesta de Donald Trump el viernes 20 de enero.
Se espera que el precio del metal siga cotizando de manera lateral antes de la toma de protesta de Trump. Es probable que el precio del metal continúe reaccionando a comentarios negativos en torno a la relación entre China y Estados Unidos, mientras que los participantes del mercado también esperan más información sobre el futuro de la política fiscal estadounidense.
El maíz y el trigo finalizaron la sesión recortando sus ganancias, luego de que en la sesión previa mostraran ganancias de 1.95% y 1.76%. El maíz finalizó la sesión con un retroceso de 0.14%, cotizando en 3.65 dólares por bushel, mientras que el trigo terminó cotizando en 4.31 dólares por bushel, lo cual equivale a un retroceso de 0.58%.
A pesar de que las condiciones climatológicas para el desarrollo de los granos son negativas, el mercado internacional continua sobre-ofertado. Por lo cual, para tener una mejora sustentable en el precio del maíz y trigo, la demanda por los granos debe incrementar o las plantaciones deben mostrar grandes daños.